La Comunidad Autónoma de Madrid estrena el viernes 5 de febrero nuevas medidas más relajadas contra el Coronavirus. Su presidenta Isabel Díaz Ayuso, se envalentonó para anunciar la apertura diciendo que había sido Madrid la economía que “había tirado” del resto del país desde que empezó la pandemia, atravesando la segunda y tercera ola. Isabel Díaz Ayuso consideró que se ve “obligada a no cerrar” porque del trabajo dependen las familias, que se verían arruinadas.

Los números dan cuenta de una disminución en la tendencia de los contagios

Con los números provistos por el viceconsejero de Salud Pública Antonio Zapatero en la rueda de prensa habitual de los viernes, que dan cuenta de un cambio de tendencia, la presidenta decidió continuar dando aire a las medidas de restricción que conjura el coronavirus.

Según Zapatero, hubo un importante cambio en la tendencia y los casos vienen disminuyendo sostenidamente durante las últimas cuatro semanas. Para el viceconsejero, la incidencia todavía es alta, pero menor que la semana pasada, situándose la cantidad de casos en 860 cada cien mil habitantes.

Alegando "motivos técnicos" que sostienen que el contagio disminuye en un 70% al aire libre, se anunció que se aumenta de cuatro a seis los participantes de las mesas en terrazas en exteriores en hostelería, donde, según la versión oficial, no se han producido la mayor cantidad de contagios como sí lo ha sido el ámbito familiar. Pero deja en claro que esta ampliación no contempla los interiores, que se mantienen al 50 % de la capacidad y con cuatro personas por mesa.

Díaz Ayuso aprueba la ampliación del aforo en terrazas

Sin embargo, esta apertura implantada por Ayuso del aforo continúa siendo muy restrictiva, ya que continúa suspendida en toda la Comunidad de Madrid los servicios y atención en barras y todos los restaurantes y bares tienen las 21:00 horas como límite de finalización de actividades.

El servicio de delivery está permitido hasta las 22:00 horas.

Las medidas fueron publicadas en el Boletín Oficial, Orden 668/2020, de cumplimiento inmediato, es decir, que desde el mismo viernes 5 de febrero los restaurantes y bares estrenan el nuevo número de seis comensales por mesa, pero agrega también el uso obligatorio de mascarillas de forma continuada.

La mascarilla se impone como obligatoria y de uso continuado

Ha explicado Díaz Ayuso que la disposición de la obligatoriedad del uso continuado de las mascarillas se debe a que las personas están tomando la costumbre de sacarse el tapabocas al entrar a un restaurante, y esto es precisamente lo que se quiere evitar: solamente está permitido quitarlo cuando se está comiendo y bebiendo, e inmediatamente después, hay que colocarlo nuevamente.