La pandemia por el Coronavirus sigue siendo un misterio para los expertos: ahora se ha publicado que la enfermedad estuvo en la ciudad de Barcelona en el mes de marzo del año 2019 pero quedó enmascarada como si fuera una simple gripe. Según los expertos, estos habrían sido los primeros casos de la enfermedad. Pero las preguntas principales de la investigación no están resueltas: ¿Dónde se originó el coronavirus? ¿Cómo? ¿Cuándo empezó la pandemia? A pesar de que el COVID-19 se declaró en la ciudad de Wuhan, en China, a principios del pasado mes de diciembre y pocas semanas después ya estaba en todo el mundo, incluido el continente europeo, parece que el primer caso no fue el oficial: un paciente en Francia durante los últimos días del mes de enero del año 2020.
La cronología oficial del coronavirus podría cambiar completamente tras los resultados de un estudio realizado por la Universitat de Barcelona en colaboración con la empresa de aguas de la ciudad condal.
Un estudio de la Universidad de Barcelona cambia completamente la cronología del coronavirus
Los investigadores han detectado una mayor presencia del virus que provoca la enfermedad del coronavirus en varias muestras de aguas residuales de la ciudad de Barcelona que fueron recogidas el pasado día 12 de marzo del año 2019. La infección ya estaba presente mucho antes de que hubiera constancia de algún caso de la enfermedad de coronavirus a nivel global. La investigacvión en la que ha trabajado un equipo formado de investigadores del Grupo de Virus Entéricos de la Universitat de Barcelona que se enmarca en un proyecto de vigilancia “centinela” del virus COVID, fue coordinada por este grupo de investigaciones, con la ayuda de Aguas de Barcelona y contando con la financiación del prestigioso proyecto REVEAL -perteneciente a la empresa SUEZ- con el objetivo principal de detectar este virus en las aguas de tipo residual y para facilitar la adopción de una serie de medidas inmediata ante la posibilidad de futuros rebrotes del coronavirus.
La presencia de coronavirus en las heces facilita la detección del coronavirus
Aunque el coronavirus es una enfermedad que afecta a las vías respiratorias, se ha demostrado que hay una gran cantidad de genoma del coronavirus, por ejemplo, en las heces, que llegarían a las aguas residuales posteriormente. Esta circunstancia ha provocada que la epidemiología que se base en aguas residuales sea una herramienta muy importante para detectar precozmente la circulación del virus entre la población, sobre todo teniendo en cuenta la gran importancia de conocer la presencia en personas presintomáticas o asintomáticas que también pueden transmitir la enfermedad.
Los niveles de SARS-CoV-2 en las aguas residuales, coinciden con los casos de coronavirus en la ciudad condal
Dentro del proyecto de vigilancia centinela, y desde el pasado 13 de abril, los investigadores están llevando a cabo una analítica, de manera semanal, muestras que han sido obtenidas en dos plantas diferentes de tratamiento de aguas residuales de la ciudad de Barcelona.
Los niveles del genoma del virus SARS-CoV-2 coinciden, de manera clara, con la evolución de los casos de coronavirus entre la población de Barcelona, según declaraciones de Albert Bosch, catedrático de Biología en la UB y encargado de la coordinación del trabajo.
Según el equipo de investigación, los resultados de las pruebas muestran que, por ejemplo, el pasado 15 de enero el virus fue detectado en una muestra, lo que significa que el virus estaba en la ciudad 41 días antes de la declaración oficial del primer caso de coronavirus en Barcelona, que se notificó el día 25 de febrero. A los infectados se les pudo haber asignado de manera errónea un diagnóstico de gripe cuando asistieron a los servicios de atención primaria, lo que facilitó la transmisión comunitaria del virus antes de que se tomasen medidas.