La empresa alemana Tönnies ha anunciado que ha encontrado 657 casos positivos de coronavirus entre los trabajadores de su red de plantas de sacrificio y procesamiento de carne en el oeste de Alemania, en el estado de Renania del Norte Westfalia. Dado que se vienen reportando brotes de Coronavirus en varios mataderos de Alemania desde el mes pasado, el gobierno alemán dispuso pruebas periódicas a todos los trabajadores de la cadena de suministro de carne. La situación genera preocupación por las condiciones de trabajo y vivienda de los empleados, muchos de los cuales son trabajadores temporales de Europa del Este.

Los mataderos son un sitio muy insalubre para los operarios

Este caso es el más violento y pone en alerta sobre una segunda oleada de contagios: en el matadero dieron positivo 657 casos sobre un total de 983 test realizados a los empleados. El distrito ha debido cerrar la empresa y poner en cuarentena a sus 7.000 empleados. Mientras tanto, en una reunión celebrada entre la canciller Angela Merkel y los 16 primeros ministros, se acordó prohibir los principales eventos en Alemania por otros cuatro meses, al menos hasta finales de octubre, para evitar una nueva ola de infecciones de coronavirus.

El coronavirus se propaga rápidamente en los mataderos por sus condiciones insalubres

En declaraciones a la prensa al final de la reunión sobre este tema, la canciller instó a los alemanes a mantener el distanciamiento social.

Se seguirá exigiendo que se mantenga una distancia de un metro y medio entre las personas en público y el uso de máscaras en las tiendas y en los medios de transporte. Sin embargo, las escuelas volverán a abrir normalmente después de las vacaciones de verano. Pero solo si las infecciones disminuyen. Angela Merkel insistió en los cuidados que hay que tomar y las difíciles condiciones en que se encuentra la economía.

No es la primera vez que se dan brotes de coronavirus dentro de los mataderos, mientras muchos en todo el mundo se han cerrado precisamente debido a la pandemia de coronavirus, otros han permanecido abiertos y las infecciones son muy altas. Mientras que en Dinamarca se exterminan los visones de granja que podrían actuar como un vehículo para el coronavirus, en Alemania se produce otro drama en el interior de los mataderos, en este caso en Renania del Norte, que puede frenar los avances contra el COVID-19 en el país europeo.

Alemania se pone en alerta por una posible segunda oleada de contagios de coronavirus

Los mataderos revelan sus horribles e insalubres condiciones laborales para los operarios, la mayoría inmigrantes de Europa del Este y, por el sistema de trabajo, mantener la distancia dentro de las factorías es imposible. El problema no es solo alemán, sino que concierne a los Estados Unidos, seguido primero por Irlanda, España, Australia, Alemania, Brasil, Canadá y el Reino Unido. Y no solo se contagian de coronavirus los trabajadores, sino que estos son vehículo hacia sus familias, pese a que las empresas aseguran que han implementado medidas de seguridad requeridas para evitar cualquier tipo de riesgo de contagio.