Rufián decidió subir una fotografía a Internet, seguramente, con la intención de provocar lo que ha logrado: la polémica y que se lleve a cabo una investigación. En dicha imagen se puede ver a los miembros de un cuerpo militar, en servicio, con el uniforme puesto y las armas en el suelo, en una terraza tomando cerveza (cuando tienen completamente prohibido tomar alcohol durante su tiempo de trabajo).

El Ejército ya ha confirmado que se está llevando a cabo una investigación después de ver la foto, que se ha viralizado en las redes sociales, después de que el portavoz de ERC decidiera compartirla.

Igualmente, aprovechan para recordar que los militares, en su horario de servicio o en activo, no pueden consumir alcohol. Y mucho menos si están armados, como se puede ver en la polémica fotografía.

El Ejército de Tierra ya ha confirmado que llevará a cabo una investigación para esclarecer las condiciones en las que se realizaron dicha fotografía y quiénes son los funcionarios que aparecen en la foto. La polémica está servida desde el mismo momento en el que, Gabriel Rufián, el miembro más mediático y portavoz en el Congreso de Esquerra República de Cataluña decidiera compartirla.

En la mencionada imagen, se puede ver a un grupo de jóvenes militares, con el uniforme puesto, con sus armas reglamentarias apoyadas en el suelo mientras están tomando una cerveza en la terraza.

El político catalán remata con un comentario: seguro que después de tomarse una cerveza, el rifle automático tiene menos peso.

La realidad es que sorprende que, a pesar de tenerlo prohibido totalmente, un grupo de militares con el uniforme puesto y armados hayan convertido un error que puede implicar su expulsión del ejército.

Las primeras informaciones indican que la fotografía fue tomada en un bar del municipio de Vilafranca del Penedés, un pequeño pueblo de 40.000 habitantes de la provincia de Barcelona. Además, los miembros que aparecen en la foto, por el uniforme, serían miembros de una compañía que forma parte de la Legión Española y que estaban descansando después de volver de unas maniobras en la zona norte de Francia.

Por otro lado, fuentes del Ejército han querido dejar claro que las armas no estaban cargadas y no hubo ningún tipo de problema con la población civil.

La infracción a la que se podrían enfrentar sería de tipo disciplinario, ya que, en el ejército español está completamente prohibido consumir alcohol cuando cualquier militar está de servicio o se encuentre en activo. La fotografía habría sido tomada durante un descanso del viaje hacia Ronda, a Málaga, donde no llegarían hasta la madrugada del domingo. La parada se realizó para que los conductores de autobús pudieran hacer su parada de descanso obligatoria y para que los militares pudieran comprar algo de comer.