La noche del pasado 25 de agosto un hombre de 37 años de nacionalidad española fue detenido en Fuenlabrada (Madrid) por retener contra su voluntad a la que comenzó siendo su pareja, pero a la que acabó convirtiendo en su esclava. La víctima, una mujer de 35 años de nacionalidad argelina, consiguió ponerse en contacto con su hermana, que la acompañó a dependencias policiales para denunciar los hechos aún en estado de shock.
La Jefatura Superior de Policía de Madrid ha confirmado que la situación de maltrato comenzó el pasado mes de mayo tras unas semanas de relación.
Desde entonces, empezaron las amenazas y agresiones tanto de índole física como sexual.
Los agentes detuvieron al hombre cuando regresaba a su domicilio y registraron la vivienda, donde encontraron dos dispositivos móviles y un ordenador repletos de archivos multimedia de gran relevancia para el caso. Gracias a las numerosas imágenes y vídeos en los que se podían ver las amenazas, vejaciones y humillaciones a las que el autor de los hechos sometió a la víctima, la Policía ha podido determinar que el acusado mantuvo incomunicada a la mujer un periodo de tiempo de 4 meses, durante los que se prolongó el maltrato.
"La tenía totalmente vigilada todo el tiempo. Llegó a romperle el tabique nasal. Una lesión de la que no fue tratada al encontrarse la víctima retenida", han asegurado fuentes policiales.
El agresor, acusado de detención ilegal, agresiones físicas y sexuales, se encuentra en prisión provisional. Desde el Ayuntamiento de Fuenlabrada se han condenado los hechos y el alcalde, Javier Ayala, ha querido destacar que "la ciudad siempre ha sido pionera y referente en sus políticas de igualdad y en el desarrollo de programas integrales en los que están implicadas varias de las concejalías municipales, ofreciendo a las mujeres y a sus hijos los recursos necesarios para que se sientan protegidas".
Días negros para las mujeres
La historia del secuestro de la vecina de Fuenlabrada ha tenido final feliz, pero no es el único hecho trágico de los últimos días en lo que a Violencia de género se refiere. El pasado viernes, una mujer de 35 años fue presuntamente asesinada por su expareja en Castellón. Tan solo dos días después, en Asturias, un hombre de 51 años apuñaló a su pareja de 29 hasta la muerte, para después ahorcarse.
Y en menos de 24 horas, otra asesinada a manos de su pareja: una mujer de 40 años, a plena luz del día en la peluquería en la que trabajaba en el barrio madrileño de Villaverde. Tres mujeres asesinadas y tres huérfanos en menos de 72 horas.