Los taxistas en Barcelona han convenido en una asamblea general declararse en huelga indefinida, manifestando que seguirán realizando movilizaciones, paros y marchas para colapsar la vía hasta que se resuelva el incidente con las licencias VTC.

Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, ha estado presente en la reunión, y ha solicitado a los taxistas que mantengan la calma y que no realicen acciones violentas.

Los taxistas quieren ver acciones y piden que Fomento no agregue el añadido al artículo 91 de la LOT y quieren que se modifique el artículo 182.2 del ROT.

Dicen que no van a salir de las calles hasta obtener lo solicitado. Indican que es necesario que se respete la proporción de una licencia VTC por cada 30 taxis. Las movilizaciones se han realizado después de la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que acordó continuar con la suspensión del reglamento.

Los taxistas madrileños también se han unido a la protesta

En Madrid los taxistas también han cerrado las paradas de los taxis desde Atocha. El gremio pide la reivindicación de la limitación de las licencias de VTC que utilizan las compañías Uber y Cabify, las cuales permiten el alquiler de vehículos con conductor.

Por su parte, el Ministerio de Fomento ha convocado una reunión con federaciones de taxistas y de VTC para este lunes, con la finalidad de buscar una solución y que cesen las protestas.

Los taxistas han estado en las calles desde el viernes, paralizando el tráfico en la Gran Vía, por lo que la Guardia Urbana se ha visto en la necesidad de desviar los accesos hacia otras calles. También han llegado taxistas de otras zonas como Bilbao y Zaragoza en apoyo a sus compañeros, y al parecer llegarán más unidades desde Sevilla.

No todo ha sido calma, se han observado actos de violencia

A pesar de la llamada a la calma, durante las protestas iniciadas desde el viernes se han visto actos de violencia entre los taxistas y los Mossos d'Esquadra. También se han reportado cortes en el servicio por parte de las compañías Uber y Cabify ya que han recibido agresiones.

Las autoridades han logrado disolver los enfrentamientos a tiempo.

En el aeropuerto de Barajas y en la estación de Atocha el servicio ha estado sin funcionamiento, aunque hay algunos trabajadores que han decidido prestar sus servicios para aquellas personas con discapacidad, embarazadas o que tengan alguna emergencia.

En Atocha se registró un incidente cuando los taxistas se percataron de que uno de sus compañeros no estaba realizando la huelga, rodearon el coche, y le rompieron los vidrios del limpiaparabrisas, obligándole a bajar a los pasajeros.

Para los taxistas no es lógico que tengan que pagar por una licencia 140.000 euros y que las VTC no cuesten más de 48 euros. Esto afecta a todos, no solo a los trabajadores sino también a los usuarios quienes deberán pagar más por los servicios si no resuelve la situación.