En la mañana del jueves, la Oficina de Prensa de la Ciudad del Vaticano dio a conocer que, el papa Francisco, reconoció las "virtudes heroicas" de cuatro Siervos de Dios. Entre el nuevo grupo de venerables se encuentra la adolescente de origen madrileño, Alexia González-Barros. El Sumo Pontífice autorizó a la Congregación para las Causas de los Santos a continuar con su proceso de beatificación.

Con este paso cumplido, solamente se espera que se compruebe un milagro médico inexplicable atribuido a su intersección para que la joven de 14 años obtenga el título de beata.

Los otros tres nuevos venerables son el exalcalde de Florencia y religioso dominico, Giorgio La Pira, el seminarista Pietro di Vitale y el joven programador informático que creó la muestra internacional de milagros eucarísticos online, Carlo Acutis. Los cuatro venerables recién proclamados son de origen europeo y tres de ellos murieron a muy corta edad. Alexia murió a sus catorce años a causa de un tumor en la columna vertebral, Carlo falleció de leucemia a los quince años de edad y Pietro pereció por complicaciones de una enfermedad estomacal a los veintitrés años.

Alexia González-Barros

La venerable nació en 1971 en Madrid, en el seno de una familia católica fiel. Sus padres eran miembros del Opus Dei y su hermana se unió a la organización cuando tenía veintidós años. A sus trece años, Alexia enfermó y, en febrero de 1985 fue diagnosticada con sarcoma de Ewing, una clase de tumor maligno, en la columna vertebral. Alexia quedó paralitica a raíz de la enfermedad y murió en diciembre.

La joven mantuvo una vida cristiana ejemplar y sufrió su enfermedad con mucha paciencia y valentía ofreciendo sus dolores por la Iglesia y por el Santo Padre, que en ese tiempo era el difunto San Juan Pablo II. La causa por su beatificación comenzó en abril de 1993.

La película Camino

En el año 2008, se estrenó un largometraje dirigido por el madrileño Javier Fesser titulado “Camino”. Fesser promocionó la película citando la vida de Alexia como fuente de inspiración. En el filme, se presentó la vida de una joven llamada Camino cuya historia presenta muchos paralelismos con la vida de Alexia. La cinta es, en principio, una crítica al Opus Dei, organización con la cual la familia de Alexia estaba muy relacionada. Muchos de los personajes mostrados en la película son presentados como fanáticos religiosos e ignorantes.

La familia de la venerable se mostró en completo desacuerdo con los hechos retratados en el largometraje y le pidió al director que eliminara la mención que se le hace en la cinta. El director mantiene su posición de que no hay nada falso en la película, aunque esta sea un trabajo de ficción.