Llegó el verano, terminaron las clases y los locos bajitos están de vacaciones full time. Frases como: ¿Y hoy qué hacemos? ¿A dónde vamos? ¿Puedo invitar a mis amigos? Se vuelven moneda corriente durante estos meses. Terminó el jardín, paso de grado o empieza la secundaria, lo cierto es que el pequeñín se dispone a pasar 3 meses de juegos y descanso, disfrutando de la ausencia de horarios, de la falta de deberes y pruebas, y de no tener ninguna obligación a lo largo de todo el día. Ahora la cuestión es ¿Cómo hacemos para que no se aburra? ¿Cómo mantener cierta rutina y orden en vacaciones?
¿Quién los cuida si mamá y papá deben seguir trabajando? No desesperar, éstas y todas las preguntas que las mamás se hacen al llegar las vacaciones, tienen respuesta. Solo se trata de organizarse, echar mano al ingenio y pensar exactamente como disponer el nuevo horario estival.
Las colonias: una alternativa útil
Las colonias de vacaciones son tal vez una de las opciones más completas e interesantes para la época de vacaciones. La hay de diversos tipos y con características muy variadas, por eso siempre es aconsejable decidirse por la que mejor se adapte a las necesidades y características de cada chico. Es necesario informarse y tener en cuenta todas las opciones antes de decidirse por una.
Si aún no pensó en la colonia y se necesita iniciar la búsqueda, estos son algunos consejos para que la elección sea la adecuada:
- Compruebe siempre que las instalaciones están en condiciones, que las piletas de natación cuenten con la protección adecuada, que existan rejas si hay balcones o ventanas altas y que en los natatorios haya siempre un guarda vidas.
- Tenga en cuenta que hay colonias de turno completo y de medio turno. Estas últimas comienzan generalmente después del mediodía, y son más económicas. Además, en muchos lugares ofrecen descuentos por grupos de hermanos.
- Hay algunas colonias que ofrecen el almuerzo, otras permiten que los chicos se lleven la vianda. En caso de que su hijo deba seguir una dieta determinada, coméntelo con las autoridades de las colonias.
- Preste especial atención a como se forman los grupos de juego y trabajo y a cuantos chicos están al cuidado de un mismo adulto. Cuanto más reducidos los grupos, mejor.
- Otra cuestión a tener presente es el transporte hacia y desde la colonia. Muchas ofrecen micros con paradas fijas y/o domiciliarias.
Tiempo de cosas nuevas
A la tele, los jueguitos, una película en video… los chicos siempre revolotean alrededor de los mismos entretenimientos que, después de unos días acaban por aburridos.
Por eso los especialistas aconsejan buscar nuevas formas de ocupar el tiempo y entretenerse (además, sin gastar dinero).
Se recomienda alternativas como leer, jugar, hacer deportes al aire libre, aprender a hacer manualidades, dormir un poco más que de costumbre e ir de visita a casa de familiares y amigos, son opciones para tener en cuenta.
Pero más allá de pensar cómo llenar tanto tiempo de ocio, es bueno dejar de planificar tanto. Vivimos en una era en la que parecería necesario y hasta obligatorio estar todo el tiempo en movimiento, haciendo cosas, yendo de allá para acá.
¿Por qué no enseñarles a los chicos que también se puede disfrutar de una charla, de un rato de música, de un instante para dejar volar la imaginación? No hace falta ser una persona ocupada las 24 horas, no hay porque inventar actividades aun cuando resultan ficticias. Organizar actividades está muy bien, es sano y positivo, pero estas deben estar siempre del servicio del crecimiento personal no para llenar un espacio que se ve vacío porque no hay nada para hacer.
Entonces, la consigna es enseñarles a los chicos a disfrutar del tiempo libre, de ratos en los que no hay nada para hacer más que conversar con alguien querido, admirar la naturaleza, escuchar una melodía.