En casi todo el mundo el 1 de mayo se conmemora el Día Internacional del Trabajo, menos en Estados Unidos y Canadá. Lo llamativo es que las huelgas masivas que terminaron por declarar este día como homenaje a las víctimas, se iniciaron en Chicago, en 1886.

En España, este año se celebra con una previsión de paro del 16,8 % según un informe de Bankinter para el 2017. Estadística que podría empeorar hasta llegar a un 18,3 % o descender hasta un 15,8 % para los más positivos.

Durante enero y febrero, meses bajos para la contratación laboral, el registro de desempleados continuó su descenso.

Una cifra que ya se había posicionado durante el 2016, con 390.540 parados menos. Más de 500 mil personas se han dado de alta en la seguridad social el último año. El informe de Bankinter, asegura que, de mantenerse este nivel de creación de Empleo, aun son necesarios 3 años más para recuperar los puestos perdidos durante la crisis económica.

El repunte de la creación de empleo comenzó a ser visible para los expertos a finales del 2013, sin embargo y pese al descenso de parados de los últimos años, los salarios y los contratos siguen afectados.

Previsiones para el 2020

Según el Programa de Estabilidad 2017-2020 que acaba de presentar el Gobierno, para dentro de 3 años las previsiones son favorables.

El paro estimado no superará el 2 % y se habrán generado cerca de 2 millones de puestos de trabajo.

Luis de Guindos, ministro de Economía, ha explicado a los medios que el cuadro macroeconómico se traduce en 20 millones de personas ocupadas para el 2019. Un año más tarde, en el 2020 y según los cálculos del ministro, ya se habrán creado todos los puestos de trabajo que la crisis se llevó, es decir 20,5 millones de personas con trabajo estable.

Estas mismas estimaciones concluyen que la tasa del paro disminuirá en un 11,2 % para el 2020. Para ese mismo año se espera que España deje de tener déficit público. Según Cristóbal Montoro, pese a que para dentro de 3 años la seguridad social aún presentará déficit, este podrá ser compensado por el superávit de la Administración Central y los Ayuntamientos.

Para este año, el Gobierno contempla que el déficit público baje hasta un 3,1 %.

La importancia de ser feliz en el trabajo

Los psicólogos y analistas laborales aseguran que, quienes están contentos en sus puestos de trabajo, lo realizan mejor, son más comprometidos con la empresa y se ausentan menos que sus compañeros.

Un equilibrio entre sueldo y empleo es el factor más importante para que un empleado se sienta a gusto. Pese a que esto es fundamental, no es el único requisito. Un empleado motivado por sus jefes, el reconocimiento de los logros y las posibilidades de ascenso, también influyen significativamente en el grado de satisfacción de un trabajador.

En España cerca del 70 % de los trabajadores no se siente feliz con su empleo.

Las causas de esta infelicidad no solo se deben a la incertidumbre que provocan los contratos laborales o los sueldos bajos, aunque es el principal factor. Para un 13 % de esos empleados que están a disgusto, el motivo radica en el tipo de labor que realizan, no es lo que los apasiona. Un 12 % de los encuestados, asegura estar a disgusto en su puesto de trabajo por el mal clima laboral que se respira. El mismo porcentaje obtiene el no tener posibilidades de ascenso en la empresa en la que trabaja y un número similar de personas asegura que no está satisfecha con la remuneración que obtiene. Apenas por debajo de ese 12 %, están las personas que no se sienten valoradas y con un 9 % las que creen que su jefe no sabe motivarlos o carece de liderazgo.

Cuando un empleado siente que sus ideas no son bien recibidas o que su valía profesional no aporta nada nuevo, también se siente infeliz con su trabajo.