Las imágenes que durante 14 días conocimos de Jimena Rico, gracias a sus redes sociales, no distan mucho de la joven que hace apenas unos días ha vuelto a pisar suelo español. La rueda de prensa que este martes, ella, su pareja, su madre y el alcalde del pueblo brindaron a los medios, por momentos la ha emocionado, pero ha mantenido la fuerza y entereza con que logró salir de Turquía.

“Eso fue lo peor. Le dije quédate aquí, que ahora vuelvo” relata ante la atenta mirada se Shaza como fue el momento en que estando en prisión las separaron. “Le dijeron que se olvidara de mí que ya no me iba a ver”.

Jimena sostiene que las autoridades turcas se han burlado de ellas en todo momento.

“En un primer momento pedí la esperanza de que fuéramos a salir de allí, pero también sabía que Jimena no se iba a ir sin ella” cuenta Shaza.

“No puedo dar detalles sobre la liberación, pero no lo creímos hasta que llegamos al aeropuerto. Cuando pueda explicar la historia, sabrán de lo que hablo. El embajador español estuvo dos días tratando de verme y a mí me dijeron que mi embajada había rechazado verme”, comenta indignada Jimena. “Los turcos nos han hecho callarnos la boca, pero no me voy a callar”.

Las relaciones homosexuales están penadas con 14 años de cárcel y la pena de muerte está sujeta al grado de religiosidad que posean. El papel del padre de Shaza comienza a jugar un rol fundamental, difícil de comprender. Al parecer, habría sido él quien las acusó internacionalmente de terroristas.