Dori Fernández no tiene dudas sobre el contenido que consumen los adolescentes y cómo los afectan.

"Crecen con los modelos de referencia que ven en los libros que leen (cualquiera de los que fomentan el pernicioso “amor romántico” de Federico Moccia); en las películas que ven masivamente (por ej. 3 metros bajo el cielo, Crepúsculo, o Las 50 sombras de Grey); en la música que escuchan y los videoclips que visionan por Internet (Hasta el amanecer de Nicky Jam con más de 1 Billón de reproducciones en Youtube y que normaliza un auténtico episodio de acoso sexista); en los videojuegos que juegan individualmente y en red; en los programas de TV que ven hasta en diferido y luego comentan (Mujeres y hombres y viceversa, Gran Hermano, Cámbiame).

Todo el mundo de la creación incide en su forma de crecer, de madurar, de socializarse. El estereotipo del chico “malote-bueno” triunfa entre ellos, frente al de la chica “tronista-sumisa-con carácter” que arrasa entre ellas. Ambos estereotipos combinan unas características comportamentales tremendamente sexistas y por tanto muy perjudiciales."