Como cada miércoles, Telecinco emitió un nuevo capítulo de la docuserie 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'. En este episodio, Rocío Carrasco abordó un tema fundamental para comprender la ruptura definitiva con su hija Rocío:, la 'mediación' entre ellas, y que durante varios años ha sido abordado en los platós de televisión con una versión muy distinta a la realidad.

Rocío Carrasco pone en entredicho la información dada por María Patiño

Durante los seis meses que Rocío Flores estuvo en libertad vigilada, por la agresión a su madre, la joven fue atendida por un equipo de psicólogos y orientadores.

En un momento del programa, los profesionales deciden ofrecer a la hija de Antonio David Flores la posibilidad de realizar una 'mediación' con su progenitora, propuesta que es rechazada tanto por la hija como por el padre. Ahora, documentos en mano, Rocío Carrasco ha querido demostrar la verdad de estos hechos, pues siempre se ha hablado de que fue ella quien se negó a tener este encuentro.

Según recoge el informe presentado por Carrasco, a Rocío y Antonio David les parecía "una aberración" siquiera plantearse esa posibilidad, pues conllevaría asumir "cualquier tipo de responsabilidad respecto del hecho denunciado". Con la verdad sacada a la luz, Rocío Carrasco ha querido callar la boca de ciertos periodistas, como "María Patiño y compañía", que ''tiene la boca seca de mentir y decir que me negué a hacer una mediación con mi hija".

Para poner en antecedentes a los espectadores, el programa decidió recuperar el fragmento de unas declaraciones de María Patiño hablando sobre este asunto, y donde la periodista recalcaba que había documentos que demostraban que una de las partes había decidido no acudir a la mediación. La presentadora de 'Socialité' no llegó a sincerarse sobre cuál de las dos partes hablaba, a lo que Kiko Matamoros, también presente en ese momento, tomó la palabra para desvelar que había sido "la madre" quien se había negado.

No fue lo único a lo que se negaron Rocío Flores y Antonio David

La negación tanto de Rocío Flores como de su padre a una mediación entre las partes, no fue lo único a lo que se opusieron. Este equipo de psicólogos y orientadores también hicieron una recomendación a Antonio David Flores para la recuperación de su hija: que esta acudiera a terapia.

La contestación del marido de Olga Moreno tampoco fue la esperada por los profesionales, y es que el exguardia civil se limitó a decir que no se podía permitir gastarse 300 euros.

Una afirmación que podría estar muy lejos de la realidad, tal y como demostró Rocío Carrasco. De nuevo con documento en mano, quiso probar que ha sido ella quien ha pagado la póliza del seguro médico privado tanto de Rocío como de su hermano David, en el que se incluía la evaluación y el tratamiento psicológico de los jóvenes.