Kiko Jiménez podría enfrentarse a una pena de prisión por el delito al que se enfrenta: desacato a la autoridad. Según un colaborador de Sálvame, si Kiko no tiene antecedentes, en caso de ser condenado, tendría que pagar una multa por el valor de 1200 euros y no tendría ninguna repercusión más.
Por el momento, el extronista de Mujeres y hombres y viceversa ya ha pasado una noche en el calabozo tras tener un problema, durante la noche del sábado, con varios agentes de la policía durante un control habitual.
El joven podría ser condenado por desacato a la autoridad y, si tiene antecedentes, podría acabar en prisión
El colaborador asegura que no ha hecho absolutamente nada pero podría llegar a enfrentarse a un presunto delito por desacato a un miembro de la autoridad y Jesús Manuel Ruiz, como colaborador de Sálvame ha dado todo tipo de detalles sobre las consecuencias que podría llegar a tener la actitud de Kiko, si es declarado culpable tras el juicio rápido de ayer lunes.
La condena en este tipo de delitos va de los tres a los seis meses y podría tener que pagar una multa durante seis y doce meses. En la mayor parte de los casos, este tipo de delitos se resuelven con el pago de una multa de unos 1200 euros, siempre y cuando Kiko no tenga antecedentes penales.
Igualmente, la resolución por parte de la autoridad judicial tendrá lugar en un plazo entre diez y doce días, por lo que el joven tendrá que esperar unas dos semanas para conocer su futuro.
En las primeras declaraciones a la prensa, el joven ha querido dejar claro que todo es una injusticia de las muchas que pasan en el día a día
Las primeras palabras del joven, al salir del calabozo de la ciudad de Marbella han sido claras: todo es una injusticia y el policía de Marbella que le denunció no lo trató igual que a cualquier otro ciudadano.
Igualmente, hasta que tenga lugar el juicio y la resolución, el joven no ha querido dar más detalles de todo lo que sucedió. Eso si, confía en la Justicia y sabe que se demostrará que todo ha sido una injusticia y cosas que pasan en la sociedad en la que vivimos.
Sofía Suescun, mientras tanto, se ha mostrado muy preocupada por el trato que le han dado, tanto a ella como a él (en el caso de su novio, al enfrentarse lo metieron en un calabozo) y espera a que esto termine bien para ellos y puedan demostrar que todo ha sido una injusticia.
De todas maneras, varios medios de comunicación señalan que el problema vino por el intento de Kiko de grabar con su teléfono móvil al agente que les dio el alto, algo que está completamente prohibido. Además, el joven reaccionó de una manera chulesca y Sofía llegó a preguntar a los agentes si sabían quiénes eran. El resultado fue que Sofía acabó detenida y Kiko en el calabozo.