Cayetano Martínez de Irujo ha protagonizado uno de los momentos más sentimentales vividos en los últimos tiempos en Televisión. El colaborador de Espejo Público no pudo evitar embarcarse en un mar de lagrimas ante el documental y posterior tertulia de Lazos de Sangre de La 1 de Radio Televisión Española sobre los miembros de su familia. Además, el hijo de la Duquesa de Alba desveló secretos de su propia vida que envolvían situaciones de violencia y no tuvo reparo en debatir las polémicas pasadas y presentes en torno a su familia.

Un documental esperado

Cayetano Martínez de Irujo fue el auténtico protagonista en el documental de Lazos de Sangre emitido en La 1 de RTVE el día 10 de Julio. Su aparición en el documental junto a otros miembros de su familia y su posterior intervención en la tertulia presentada por Boris Izaguirre reveló una serie de noticias desconocidas para el gran público de naturaleza, cuanto menos, delicada. El repaso a la familia de la Duquesa de Alba contaba una serie de historias de vida narradas por sus protagonistas, pero sin duda las del jinete fueron las que más llamaron la atención por su dosis de dramatismo.

Maltrato infantil que acabó en terapia

Cayetano Martínez de Irujo empezó narrando un relato duro de violencia que vivió cuando era pequeño.

Una de sus nannies le propinaba tortazos, experiencia que terminaría marcando su carácter de adulto. Además, reconoció sin ningún tipo de pudor y entre lágrimas que había asistido a terapia psicológica durante muchos años para arreglar el conflicto emocional que sufría a la hora de entablar relaciones con mujeres. El jinete se mostró totalmente abierto a hablar de su problema indicando que, a pesar de las dificultades, hoy en día se encontraba ya resuelto; aunque matizó que el contraste entre lo emocional y lo racional fue un peso que le costó mucho llevar cuando era joven.

Una figura maternal complicada

Otro asunto del que habló Cayetano Martínez de Irujo fue la difícil relación que estableció con su madre. Al parecer, la Duquesa de Alba no comentó absolutamente nada de la enfermedad terminal que acabaría con la vida de su marido a sus hijos más pequeños. Especial mella hizo en el jinete, quien aunado a los problemas anteriormente citados, se encontró huérfano de padre sin recibir explicación alguna, algo que supuso un gran trauma para él, generándole una sensación de abandono dentro de su propia familia.

Sigue habiendo problemas en la familia

En otro terreno menos sentimental aunque unido a los miembros de su familia, Cayetano Martínez de Irujo se mostró crítico con la gestión de su hermano Carlos respecto a la gestión del patrimonio del Ducado de Alba; situación que hoy en día les mantiene distanciados. El jinete no dudó en afirmar que el liderazgo ejercido por su hermano no tiene nada que ver con lo que quería su madre. Asimismo, declaró albergar grandes esperanzas respecto a su sobrino Fernando como un gran Duque de Alba.