El pasado 12 de octubre, día de la Hispanidad, transcurrió de manera un tanto accidentada para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Era la primera ocasión en la que el presidente socialista presenciaba como representante estatal el desfile de las Fuerzas Armadas, al que acudía junto a su mujer Begoña Gómez. Sin embargo, los asistentes al desfile lo recibieron con numerosos abucheos y gritos de "okupa" y "convoca elecciones ya". Unas críticas que no fueron las únicas, pues se unieron las del error de protocolo durante el besamanos.
Begoña Gómez y Pedro Sánchez, protagonistas indirectos del día de la Hispanidad
Concretamente, el presidente socialista junto a su esposa Begoña Gómez fueron la comidilla política durante el día de la Hispanidad por su error protocolario, en el que acudieron al besamanos de la recepción real, saludaron al monarca y la consorte y se colocaron junto a ellos, algo que hizo que los servicios protocolarios de la Casa del Rey alertaran a la pareja y éstos salieron del recinto con caras de desconcierto. Sin embargo, apenas unas horas más tarde del llamativo suceso, las explicaciones han llegado tanto por parte de Moncloa como de la Casa del Rey.
Moncloa argumenta que el presidente del Gobierno siguió las instrucciones protocolarias de Casa Real
En el caso de Moncloa, han puesto de manifiesto que tanto el presidente socialista como su mujer, siguieron el protocolo puesto por la Casa del Rey en todo momento, por lo que han justificado que se colocaran en la misma línea de saludo del Jefe de Estado y la reina Letizia.
A pesar de esto, han sido numerosas las versiones que han circulado al respecto, eso sí, tanto la Casa del Rey como Moncloa han intentado quitarle leña al asunto dejando en evidencia que el presidente del Gobierno siguió en todo momento las directrices protocolarias de la Casa Real.
Fueron alertados por la Casa del Rey sobre el besamanos
Eso sí, Moncloa ha puesto de manifiesto que en ningún momento ni el presidente del Gobierno ni su esposa han querido alterar el protocolo del besamanos, es más, fueron alertados de que se quedasen durante poco tiempo junto a los monarcas mientras la fila se iba organizando y de ese modo, pasar al salón. No obstante, llegaban a estrechar la mano a la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, poco antes de ser alertados por uno de los servicios protocolarios de Casa del Rey antes de abandonar la sala.