Había mucha expectación para comprobar si Ana Rosa Quintana iba a dar alguna clase de explicaciones en las Mañanas de Telecinco sobre la detención de su marido en este verano. Al final, su vuelta a los platós de televisión ha ido acompañada con un escueto mensaje: “Este desde luego que no ha sido el mejor verano de mi vida, aunque tampoco el peor”.
La presentadora ha hecho gala de una gran templanza al no ponerse nerviosa en ningún momento, pero lo cierto que no ha dado ninguna clase de explicaciones sobre la situación de su pareja sentimental, Juan Muñoz.
Sino que tan solo se ha limitado que hay que “hacer que jueces y abogados hagan correctamente su trabajo y confiamos en ellos”. Estas palabras han generado una fuerte controversia en las redes sociales al comentarse como no ha aplicado Ana Rosa Quintana esta medida con otros casos que se han debatido en su programada de lunes a viernes.
Ana Rosa alude a que no es la apropiada para informar sobre este caso
En lo que sí ha incidido una de las estrellas de Telecinco es en dejar muy claro que se siente respaldada por todos sus compañeros y rematar que “ahora solo me queda trabajar como siempre”. Pero en ningún momento ha dado explicaciones sobre el suceso de que han sido objeto este verano, ni tan siquiera ofrecer la versión de la pareja sobre los hechos acontecidos a finales de julio.
Tan solo se ha referido a que ella no es la persona más apropiada para informar sobre un tema que afecta a su familia.
Por otra parte, en ningún momento se ha referido al ex comisario Villarejo que juega un papel muy importante en el proceso judicial que se ha abierto para esclarecer este caso. Ni de las presuntas extorsiones que se han producido contra otras personas.
Dedica muy pocos minutos para hablar del asunto de su marido
Tras muy pocos minutos hablando sobre este tema de la actualidad nacional, rápidamente se ha dirigido a comentar otros asuntos de relevancia del panorama político nacional. Como por ejemplo, el abandono de la política por parte de Soraya Saénz de Santamaría. Momento en el que de nuevo han aflorado las sonrisas en el rostro de Ana Rosa Quintana y se le ha visto más relajada que antes.
En cualquier caso, sus declaraciones contrastan con su intención de tratar este tema a la vuelta de las vacaciones, tal y como comentó en los primeros días de agosto. Lo que ha supuesto a los telespectadores una gran decepción que puede hacerla perder cuota de pantalla.