Y por fin llegó el día en que el novio decidió abandonar la cueva en la que ha estado recluido durante muchísimos años para asumir su posición pública de Rey de corazones consorte que tanto se le venía reclamando desde distintos sectores.

Lo hizo el pasado sábado y, como no podía ser de otra forma, en Telecinco. Concretamente en Sábado Deluxe, formando parte de las sorpresas que se le realizaron a su chica para conmemorar el triunfo judicial frente al que fuera su representante, Toño Sanchís, durante más de una década.

Después de recibir el apoyo y el cariño de muchos compañeros de la profesión y de algún amigo personal, la conocida públicamente como la princesa del pueblo, veía como, por primera vez desde que lo conoce, su chico se atrevía a hablar en un medio de comunicación, dejando escuchar su voz a los fans de Belén Esteban por primera vez.

Miguel Martos, protagonista del Belenazo

Un sorpresón en toda regla que emocionaba a la colaboradora de Sálvame, sobre todo porque las palabras que el conductor de ambulancia le dedicó no podían ser más bonitas. Este le recordó lo mucho que la quería y lo mucho que ha deseado que llegara este momento para ver por fin feliz a una Belén que ha pasado casi cuatro años de lloros y miedos que se acababan cuando, justo hace una semana, la justicia le daba la razón.

En su intervención, además de asegurar que estar con la Esteban le ha cambiado la vida para siempre convirtiéndolo en el hombre más feliz del mundo, fue un paso más allá y soltó la gran bomba que abre la puerta a un carrusel de noticias al respecto que vamos a ver si alguien lo logra parar.

Tomando como punto de partida las palabras de su chica, que comentó que las ideas de volver a pasar por el altar y tener un nuevo hijo, dependían de cómo fueran las cosas en su juicio contra el que fuera su representante -algo que ratificaba hace un par de años- Miguel, ni corto ni perezoso, le dejaba caer sus irrefrenables ganas de casarse con ella.

El plan trazado por Belén Esteban y Miguel

Lo hacía deslizando que, quizás, había llegado el momento de empezar a preparar un enlace en el que ambos han pensado mucho y que han comentado en más de una ocasión. Algo que sonrojaba y alegraba a partes iguales a una radiante Belén Esteban a la que parece la suerte no deja de sonreírle de un tiempo a esta parte.

Si se confirma, pues, la hoja de ruta que en varios "Belenazos" la de San Blas había trazado, quizás haya boda en 2019 y quién sabe si retoño en 2020. Ya nada les inquieta.