La “larga noche” portuguesa ha llegado a su epílogo tras no pocas dificultades; en efecto, entre cantantes retirados acusados de plagio, mientras que también han existido acusaciones de posibles manipulaciones en los votos por parte del jurado, finalmente el pasado domingo se eligió en Guimarães a la representante del país anfitrión, Portugal, en la final del celéberrimo Festival da Canção emitido por el primer canal de la televisión pública lusitana, RTP en horario de prime time.

Favorita por la audiencia , no tanto por el jurado

Catorce candidatos llegaron a la final y tras sus respectivas actuaciones, el jurado nacional empezó a emiitir su respectivos votos, otorgando la victoria a la cantante Catarina Miranda que con su tema “Para sorrir não preciso de nada” (No necesito nada para sonreír) consiguió 71 puntos, ocho puntos por delante de la segunda clasificada, Cláudia Pascoal; los puntos de los miembros de la comisión se convirtieron en puntos “eurovisivos” por lo que Catarina estaba en cabeza con 12 puntos, seguida de cerca, a tan solo dos puntos de ventaja sobre Claudia.

Pero fue el televoto quien da el vuelco a la situación al conceder a la hasta entonces segunda clasificada la máxima puntuación por lo que la situación terminó con un empate técnico con Catarina Miranda que consiguió los 10 puntos por parte de la audiencia, provocando que tanto Claudia como Catarina terminase en idéntica posición al obtener cada una de ellas un total de 22 puntos; el desempate se resolvió en favor de Claudia Pascoal al ser la decisión del público la que prevalece, imponiéndose a la del jurado nacional, consiguiendo así que Cláudia Pascoal se convirtiera en la ganadora de esta final con no pocas incertidumbre y emociones a flor de piel.

Un tema para paladares refinados

“O Jardim” (El jardín), que es el título que lleva la canción ganadora es un tema de sonidos “electro-pop” , muy característico de la nueva generación de cantantes portugueses como “Amor Eletro” o “The gift”; la canción que fue interpretada con el acompañamiento de una corista que llevaba una camisa de fuerza, es una declaración de amor a la abuela fallecida de la intérprete; regar las flores del jardín se convierte en una metáfora para recordar de la persona amada desaparecida.

La canción requiere de varias audiciones para conseguir sacarse de encima lo que a primera vista parece un tema de género musical escasamente festivalero. Portugal, por el privilegio de ser el país anfitrión del festival de Eurovisión de este año, pasará a actuar en la final prevista para el sábado 12 de mayo.

¿Quién es Cláudia Pascoal?

Cláudia Pascoal nació en Guimarães hace 23 años; su debut musical tuvo lugar en el año 2010 al participar en el talent show “Idolos”, versión lusa del famoso concurso musical “American Idol”; tres años después , probó suerte de nuevo , en esta ocasió en la versión portuguesa del programa “Factor X” aunque sin mucho éxito; recientemente, en el 2017, logró ser una de las finalistas del concurso televisivo “The voice of Portugal”, (La voz).

Una victoria ansiada 53 años

Nuestro país vecino hizo su debut eurovisivo en el año1964 enviando a António Calvário con el tema “Oração” (Oración) consiguiendo un desalentador último lugar con “zero points” , participando posteriomente hasta un total de 49 ocasiones. El año pasado, en Kiev, consiguió una merecedora victoria con la maravillosa canción interpretada por Salvador Sobral, “Amar pelos dois” (Amar para los dos), que desbancó el certamen consiguiendo 758 puntos, siendo la puntuación la más alta conseguida hasta la fecha.