Kim Kardashian y Kanye West tuvieron que enfrentarse hace unos meses a una de las decisiones más difíciles de toda su vida. El matrimonio quería traer al mundo a un tercer bebé, después de sus dos anteriores, North y Saint. Sin embargo, la celebritie ha tenido que soportar embarazos muy complicados que, incluso, han puesto en peligro la vida de Kim y la de los futuros bebés. La celebritie sufre de placenta acreta lo que provoca que la placenta se quede adherida al útero de la mujer dificultando mucho el parto.
Pero la pareja tenía claro que deseaba tener un hijo más y para ello, tal y como hemos podido seguir a través del programa Keeping Up with the Kardashians, barajaron varias posibilidades optando finalmente por la gestación subrogada.
El matrimonio tuvo que elegir se prefería un embrión femenino o masculino
Después de encontrar una madre subrogada que se adecuara a lo que ambos estaban buscando y que fuese de confianza para la pareja, tocaba decidir qué embrión querían implantar en el útero de su candidata. Ellos podían elegir el sexo de su futuro retoño y, sin embargo, optaron por la opción más segura. La única preocupación de Kim es que el bebé naciese lo más sano posible y evitar cualquier tipo de complicación durante el embarazo, así que lo único que le preocupó a la hora de esta difícil decisión fue cuál era el más idóneo.
"¿Cuál es el más sano? Elige el más sano" eso fue lo que respondió Kim ante la pregunta del futuro sexo del bebé.
El resultado, nueve meses después, ha sido una preciosa niña a la que han llamado Chicago y de la que por el momento, lejos de lo que nos podríamos esperar de la reina de las redes sociales, no hemos tenido apenas imágenes. Con esta, Kim y Kanye ya tienen dos chicas y un chico.
Puede que estén persiguiendo el cuarto y último hijo
Kim se ha criado en una casa llena de hermanos y siempre rodeada de mucha gente. Además siempre ha afirmado que quería ser madre de familia numerosa, al igual que su hermana mayor, Kourtney. Sin embargo, debido a los problemas de sus anteriores embarazos, todos creímos que se conformaría con North y Saint, pero no ha sido así.
Después de traer al mundo a su tercer bebé, la socialité ha afirmado que podría estar interesada en un cuarto bebé pero, que definitivamente este sería el último.
No olvidemos que Kim tiene una de las agendas más ocupadas del planeta y que repartirse entre sus cientos de negocios, su matrimonio y sus hijos puede resultarle demasiada carga. Pero, no sabemos si habrá definitivamente un nuevo miembro del clan Kardashian o no. No creemos que los rumores tarden en aparecer y volver a formar el mismo revuelo de estos últimos meses alrededor de los embarazos Kardashian-Jenner.