Si la mayoría esperaban viendo los cebos que “Sálvame” emitió durante la semana, que Kiko Matamoros llegaba para, siguiendo la estela dejada por Carlos Lozano, poner a caldo a los colaboradores; no hay duda que debieron de quedar decepcionados.

El ex colaborador de “Sálvame” llegó al plató del "Deluxe" mucho más conciliador de lo que cabía esperar, tal vez porque no le interesa quemar la hierba bajos sus pies, no vaya a ser que la productora de “Supervivientes” trague y le permita participar con Makoke, condición por lo visto sine qua non para desplazarse a Honduras.

Si finalmente concursa, está claro que no tiene interés en ponerse en contra a todos sus ex compañeros. Por eso nadó y guardo la ropa llevándoselo calentito en una entrevista más corta de lo esperado y en la que vimos a un Jorge Javier nervioso y deseando darla por concluida.

La Belén Esteban más despreciativa

Fue la primera aludida y decidió, en lugar de vociferar como acostumbra, intentar mantener las formas todo lo que pudo. Su actitud no obstante era profundamente despreciativa. Ya lo había dejado claro dentro de su suprema estulticia: “¿Qué título tiene? ¡El mismo que yo, la Televisión”.

Matamoros cree y con razón que los colaboradores se están cargando “Sálvame” ya que ahora en su dorado retiro está muy al tanto de todo lo que se cuece en redes sociales.

Hay gente a la que se protege excesivamente y no le viene nada bien. Por ejemplo, Belén y la gente opina también“. La cara de la susodicha era un poema.

Es tan absurda esta mujer que optó por intentar atacarlo preguntando, dejando claro que era sin ánimo de ofender, de que vivía ya que a ella no le consta que tenga ingresos, a lo que Matamoros sin inmutarse le contestó: “Tú lo has dicho, a ti no te consta”. Desmontándola y dejándola in albis igual que hizo Carlos Lozano hace unos días.

Poco más pudo hacer la colaboradora a quien tratan de reconvertir en entrevistadora sin éxito. O no le escriben bien las preguntas a realizar o hay una mano negra empeñada en dejarla a los pies de los caballos un día sí y otro también.

María Patiño estalla

Se la veía cada vez más enrabietada, con esa vena que es como una marca de fábrica a punto de explotar, así que cuando escuchó a Matamoros decir: Aquí lo que cultivamos todos es un egocentrismo desbordado. Faltan voces para que establezcan cierto equilibrio en el discurso”. Saltó como un resorte:Llevo dos semanas con la gente dándome lecciones y me estoy empezando a cansara lo que Kiko contesto:Pues en vez de cansarte piensa por qué te las dan”.

Patiño totalmente fuera de sí y a voz en grito le espetó: ¡Pero tú quién te crees que eres para venir aquí a ponernos en nuestro sitio!”. ¡Para mí es muy fácil sentarme ahí y meterme con los compañeros, lo difícil es currártelo aquí día a día, como tú bien sabes!

”. Kiko le contestaba que eso no se lo dijese a él que era el colaborador que más horas había trabajado.

Y así quedó la cosa. Patiño y Esteban puestas nuevamente en evidencia, sobre todo la presentadora de “Socialité” que mantiene una actitud prepotente y combativa que recuerda mucho al dicho popular: “Si quieres conocer a alguien, dale galones”.