Uno de los temas que más ríos de tinta ha provocado en los últimos tiempos en relación a Belén Esteban es el que estaba vinculado a su renovación y a supuesta oferta a la baja que le habría ofrecido la productora y la princesa del pueblo debía decidir si aceptaba o dejaba pasar a la espera de alguna otra mejor de otro medio de la competencia.

Sin embargo, poco se conocía de los detalles de esta oferta. Todo quedaba tapado con la exclusiva de la de San Blas en la que desmentía que se le hubiera ofrecido un contrato a la baja tras las progresivas bajadas de audiencia que han ido salpicándose a cada entrevista exclusiva suya en el Deluxe.

Pues bien, ahora, a tenor de lo que han publicado los compañeros de EsDiario tras tener acceso a los pormenores de esta ampliación contractual, hemos podido saber que, al parecer, a Belén Esteban ni se le subirá el sueldo ni se le bajará. Es decir, que este queda congelado sine die, a la espera de que ciertos movimientos de la audiencia determinen hacia donde fluctúa el mismo.

Sobre una base que en algunos mentideros estipulaban en varios cientos miles de euros incluyendo cuatro "Belenazos" en el Sábado Deluxe, esta podría mejorarlos en su próxima rúbrica si demostraba que el interés que venía despertando vuelve a subir como lo hizo, año tras año, durante la última década.

La publicación a la que hacemos referencia habría sido testigo de una filtración en la que se aludiría a al menos dos posibles motivos para congelar el caché de la que fuera mujer de Jesulín de Ubrique.

El primero, el que se vino contando en relación a la bajada notable de presupuesto de los programas en los que esta participa y que provocará, además, que varios de sus compañeros vean cómo sus salarios sí bajan.

Los supuestos motivos de la congelación salarial a Belén Esteban

El segundo, su negativa a hablar de algunos de los temas candentes que más interesan a los fans de la crónica social patria como son los que tienen que ver con su hija Andrea Janeiro, de quien esta se habría negado a mentar, ni siquiera para contarnos qué notas va sacando tras adentrarse en el siempre interesante mundo universitario.

Así pues, parece que tampoco era todo tan bonito como las partes implicadas nos querían hacer ver cuando se vino hablando de que el contrato que le pondrían a la madre de Andreíta encima de la mesa podría provocar un cisma que pusiera en tela de juicio su renovación. Ni sube, ni baja por ahora. Las razones para no subírselo por primera vez parecen de peso.