Impecable. Así puede calificarse la carrera de uno de los actores ingleses menos reconocidos por tal nacionalidad, pero tan bueno como todos los que de allí salen a difundir al mundo su talento. Clive Owen podría haber sido un James Bond de leyenda pero no le dieron la oportunidad de meterse en la piel del agente secreto, sin embargo tiene títulos en su filmografía para compensar con creces esa carencia, un buen número de obras maestras que ponen de manifiesto el buen gusto del actor al decantarse por uno u otro proyecto. Croupier, Gosford Park, The Bourne identity: El caso Bourne, Closer, Sin City, Plan oculto, Hijos de los hombres, Duplicity...

La lista es apabullante, y él sigue rodando gozadas, como si fuera la primera que hace.

TVE programa, en su espacio "La película de la semana", The International: Dinero en la sombra, otra de las muestras de su extraordinario criterio a la hora de ponerse a seleccionarlas. Un thriller en el que un agente de la Interpol y una fiscal se proponen seguir los pasos de las actividades ilegales del banco que da título a la película. Clive Owen y Naomi Watts son los protagonistas, una pareja de lujo para una cinta que destila inteligencia y espectáculo. El responsable de conseguirlo es Tom Tykwer, el alemán que asombró al mundo con Corre, Lola, corre y que aquí continúa en la misma línea. De hecho, la película tiene una secuencia rodada en el museo Guggenheim de Nueva York que, de haberse filmado en los años 70, habría constituido parte de una obra de la que aún hoy se estaría hablando en vez de haber quedado sepultada por debajo de muchas otras infinitamente más mediocres que ella.

Lo que está claro es que Clive Owen es uno de los grandes en una época donde los grandes no reciben la atención mediática que se merecen. Tiene talento, tiene belleza, no ofrece escándalos y se entrega a su trabajo lo mejor que sabe, y lo sabe hacer muy bien, lo cual nos ha enseñado que cada vez que tengamos a mano una película donde él intervenga sería conveniente darle una oportunidad, porque lo más seguro es que el resultado esté muy lejos de defraudarnos.