Dos fármacos recomendados cuando existe la necesidad de reducir la función tiroidea se encuentran bajo la mira de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitario por la sospecha de causar pancreatitis. Los dos fármacos son el carbimazol y el tiamazol.

En la alerta emitida también se recomienda a las mujeres embarazadas evitar en la medida de lo posible, el uso de medicamentos que contengan estos componentes, ya que se puede presentar el riesgo de malformaciones congénitas que pueden deberse al uso de estos medicamentos durante el periodo de gestación.

En los casos bajo estudio, la condición de pancreatitis aguda mejoró significativamente, cuando se suspendió la administración de estos medicamentos. Por lo que los pacientes que consuman carbimazol o tiamazol, bajo sus nombres comerciales de Neo-Tomizol y Tirodril, y desarrollen pancreatitis, deben suspenderlos de inmediato y no volver a ser tratados con ellos.

Los riesgos de malformación genética

Aunque lo estudios aún no son concluyentes, si existen indicios para presumir, que si se presenta un alto nivel de riesgo que se produzcan malformaciones congénitas con el uso de estos medicamentos durante la etapa de gestación, riesgo que no está presente si no se usarán.

La etapa más delicada, es cuando son administrados en altas dosis en el primer trimestre de embarazo. Las malformaciones que se pueden presentar son: malformaciones craneofaciales, aplasia cutánea congénita (falta de dermis y epidermis en cierta zona del cuerpo), onfalocele (cuando e intestino, hígado y otros órganos abdominales salen por el ombligo), desarrollo insuficiente del esófago, entre otras malformaciones.

En caso en que el tratamiento con estos medicamentos sea indispensable, la Asociación recomienda llevar un control estricto, tanto a la madre como en las etapas fetal y neonatal, y utilizar la mínima dosis efectiva posible. Así mismo, se recomienda evitar el embarazo durante el tratamiento con estos fármacos, y notificar al médico su consumo en caso de planificar hacerlo.

Los casos de pancreatitis asociados

Los fármacos cuestionados son normalmente recetados en casos que se desee reducir la función de la tiroides, como cuando existe hipertiroidismo, crisis tirotóxicas o cuando se prepara para una tiroidectomía. El carbimazol se transforma en tiamazol una vez que entra al torrente sanguíneo, el cual inhibe la síntesis de la hormona tiroidea.

Ante los estudios realizados en pacientes tratados con los dos fármacos, que pueda existir un riesgo de pancreatitis aguda, se aconseja la suspensión de los mismos. Si bien no se conoce aún el mecanismo por el que estos fármacos producen la pancreatitis, se piensa que puede existir un mecanismo inmunológico asociado.