Ese agotamiento físico sin final, que ni un buen reposo, ni unas relajantes y merecidas vacaciones pueden vencer, es el llamado Síndrome de Fatiga Crónica (SFC).

Aún se desconocen sus causas, pero se cree que están relacionadas con el virus de Epstein-Barr (VEB) o el virus del herpes humano tipo 6 (HHV-6) y también con la inflamación de nuestro sistema nervioso, y esto es debido a una respuesta defectuosa en el sistema inmunitario de nuestro organismo.

¿Prueba diagnóstica?

Aunque no existen pruebas realmente específicas y que den resultados exactos para confirmar el diagnóstico de síndrome de Fatiga Crónica, existen informes de pacientes que arrojan resultados que no son normales en los exámenes de resonancia magnética del cerebro y en el conteo de glóbulos blancos.

Síntomas

  • Fatiga severa.
  • Dificultad para conciliar el sueño.
  • Dificultad para concentrarse.
  • Mareos.
  • Constantes dolores corporales.

¿Existe una cura para este síndrome?

No, no existe pero si un tratamiento el cual tiene un objetivo claro y es ayudarnos aliviar los síntomas, en el mismo se utiliza:

  • Terapia cognitiva-conductual (TCC) y ejercicio gradual para ciertos pacientes.
  • Una nutrición/alimentacion Saludable.
  • Técnicas de manejo del sueño.
  • Practica regular de actividad física.
  • Se evita el uso o empleo de sustancias tóxicas y no naturales.
  • Recetan medicamentos para disminuir el dolor, la fatiga y los elevados niveles de temperatura o fiebre.
  • También, medicamentos para tratar/controlar la ansiedad (ansiolíticos).

Y sobre todo, los medicamentos para tratar síndromes depresivos (antidepresivos).

También existen diversos fármacos que tienen el poder de ayudarnos a mejorar los síntomas de la enfermedad, como:

  • Tratamientos alopáticos.
  • Neurolépticos antipsicóticos.
  • Tranquilizantes ansiolíticos.
  • Sedantes hipnóticos.
  • Miorrelajantes.
  • Antioxidantes.

Consejos...

  • Mantener una actitud positiva ante la vida.
  • Reconocer y expresar nuestras emociones.
  • Escribir para recordar con notas cortas lo que tenemos pendiente hacer.
  • Regalarnos tiempo para realizar nuestras actividades habituales, con calma.
  • Informarnos sobre la enfermedad.
  • Consultarlo con profesionales de confianza.

Debes conocer...

  • Que el síndrome de fatiga crónica puede afectar a personas de todas las edades y grupos étnicos, pero las mujeres tienen más riesgo que los hombres.
  • Este síndrome es muy poco frecuente en los niños, sin embargo un porcentaje muy pequeño podría padecerlo.
  • Puede afectar o perjudicar a algunos adolescentes, pero es más frecuente que afecte a personas entre los cuarenta y sesenta años.
  • Las personas jóvenes con síndrome de fatiga crónica suelen mejorar con tratamiento a través del tiempo más que los pacientes mayores.