Triste realidad, pero la grasa se acumula en lugares específicos del cuerpo. Estas zonas varían entre las persona; sin embargo, una de las más comunes es el abdomen. Casi nadie se salva pues, aunque seas delgada y activa, suele pasar que tu abdomen no sea el más plano. Hasta ahora, por desagracia, no existe una solución mágica para desaparecerla.

Si eres una chica delgada, pero a tu abdomen más bien se le puede llamar barriga, la solución más potente es el ejercicio. En tu caso, no hay nada mejor que tonificar los músculos abdominales (o sea, hacer abdominales) y realizar un poco de aeróbicos, eso marcara la diferencia.

La cosa es que tú te lo propongas.

Por otro lado, para las personas con sobrepeso o unos cuantos kilos de más, la respuesta es combinar dieta con ejercicios. ¿Por qué tanto esfuerzo? Al parecer, en este caso, el ejercicio por sí solo no es suficiente debido a que hay una acumulación de grasa en esta área que impide que los músculos trabajos sobresalgan.

¡Pon la panza en su lugar!

La fórmula ideal es combinar una rutina en la que tres veces a la semana realices 30 minutos de ejercicios aeróbicos con otros tres días de 30 minutos de entrenamiento muscular. Los aeróbicos (correr, bicicleta, caminar, trotar, spinning, kick boxing, etc.) te ayudaran a quemar calorías, mientras que los anaeróbicos ayudan a fortalecer los músculos.

Para mantener un abdomen plano es necesario combinar ambos tipos de ejercicios.

Otro punto importante es comer balanceado. Evita las grasas saturadas (frituras y grasas animales), consume proteínas (carnes magras, soya, huevo, leche y quesos bajos en grasas) y modera tu consumo de carbohidratos (pan, pastas galletas, refrescos, dulces y azucares).

Toma de 2 a 3 litros diarios de agua y súbele al consumo de fibra (verduras y frutas). Bájale a la sal y a las bebidas alcohólicas pues son culpables de la retención de líquidos.

Una vez cada 15 días desintoxica tu cuerpo comiendo todo un día fruta, verduras, jugos, tés y mucha agua. Así desinflamaras tus intestinos, el colon y todo el estómago.

También abdominales bien hechas, son todo un arte.

Los tipos de abdominales más comunes

En primer lugar, los abdominales estelares. Existen muchos abdominales, pero nos hemos tomado la libertad de recomendarte las más efectivas. El abdomen bajo, esta es la parte que más debemos trabajar las mujeres, por eso es que le daremos más énfasis en tres ejercicios: boca arriba con las piernas estiradas, pon las manos detrás de tus glúteos, luego levanta las piernas lo más estiradas posibles a 45 grados, mientras respiras, bájales lentamente al ras del suelo.

El abdomen alto y medio, boca arriba con las piernas flexionadas, y con las manos entrelazadas en la nuca, levanta tu torso a 30 grados mientras exhalas cuidando que tu coxis no se separe del piso y que tu abdomen no se salga de lugar.

Por último, los oblicuos, acuéstate de costado doblando tus piernas hacia atrás y coloca tu manos entrelazadas detrás de tu nuca y levanta haciendo uso de los músculos laterales de tu torso.