En muchas ocasiones el ritmo acelerado con el que actualmente vivimos nos puede llevar a adoptar rutina o costumbres que, a largo plazo, pueden influir de mala manera en nuestra salud, dando paso a graves daños en nuestro organismo. A continuación te ayudaremos a identificar esas costumbres o rutinas que debes evitar para mantener un estado de bienestar.
¡No te saltes el desayuno!
El desayuno, como bien sabemos, es la comida más importante del día; nuestra energía de arranque depende de esta primer comida que nos permitirá estar activos hasta la merienda o almuerzo, así como realizar actividades físicas o trabajar.
De esta depende entre el 10% y 30% de la energía diaria. Un desayuno ideal debe estar compuesto por carbohidratos que son la principal fuente de energía del organismo (cereales, granos, panes integrales). Debe estar presente la proteína que nos brinda protección al músculo (huevos, leche, quesos y pollo) y una pieza de fruta que nos brindará vitaminas y minerales.
Cenar mal y muy tarde
Debemos tener presente que esta acción conlleva a que nuestro organismo gaste la mayor parte de la energía en la digestión, así como parte del tiempo de descanso en digerir la comida. Es recomendable que la cena no sea mayor al 25% de la energía total de nuestra dieta. De esta manera, evitaremos ir a la cama sintiendo alguna pesadez o muy llenos u alguna mala digestión.
Falta de ejercicio
La inactividad o sedentarismo causa pérdida de masa muscular así como debilidad en los huesos. Aparte que la falta de ejercicio y mala alimentación son el conjunto perfecto para desarrollar diabetes y obesidad. Puedes incluir actividades físicas en tu rutina diaria, como caminar, trotar, rutina de pesos u otros ejercicios cardiovasculares.
Si junto a esto le sumas una dieta sana, balanceada y nutritiva, podrás gozar de una vida Saludable y activa.
Ser pesimista y estrés excesivo
Aunque en ocasiones es inevitable ser pesimista o estresarse en algunas situaciones de la vida cotidiana, como él trabaja o por la falta de tiempo, es recomendable reducir el nivel de estrés y pesimismo; este tipo de emociones tienden a agotarnos física y mentalmente.
Cuando pases por esta situación práctica la meditación, o sal a caminar y desconectarte unos minutos de eso que te estresa, de esa manera podrás liberar la tensión te ayudara a la toma de decisiones.
El uso excesivo de la tecnología
Es recomendable regular el uso de aparatos tecnológicos u electrónicos como el teléfono, la computadora, la televisión u otros. Ya que, aparte de no ser muy beneficioso para la vista, está comprobado científicamente que estos influye en la dificultad para dormir, así como el bajo rendimiento a lo largo del día.
El alcoholismo y tabaquismo
Muchos conocemos los riesgos que vienen incluidos en el tabaquismo y alcoholismo. Ambos, a largo plazo, son nocivos para la salud; el tabaquismo puede producir cáncer en los pulmones y el alcoholismo puede desarrollar cirrosis hepática.
Aléjate de ellos; no traen nada bueno a tu vida y salud.
No tomar suficiente agua
Como bien sabemos nuestro organismo está compuesto por 70% agua. De hecho, el cuerpo humano pierde alrededor de 1480 mililitros de agua al día. Se recomienda beber 8 vasos de agua al día para así recompensar el agua perdida y evitar así la deshidratación.
No descansar lo suficiente
Es vital descansar lo suficiente, así tendremos la energía necesaria para empezar un nuevo día. Caso contrario, la falta de sueño provocaría estrés u mal humor a lo largo del día. Se recomienda dormir ocho horas.
