¿Sabes que algo más de la mitad de los españoles llevan barba? Aunque la mayoría dice hacerlo por comodidad, en torno a un 10 % no se afeita por complacer a su pareja. Bigote, perilla, barba balbo, de chivo, mosca, Lincoln... optes por el estilo que optes su aspecto y crecimiento depende, y mucho, de los cuidados que le brindes. ¿Sabes que debes lavar, cepillar e hidratar tu barba?

Cuidados básicos de las barbas

La contaminación ambiental, el tabaco, los restos de comida etc. Son muchas las razones por la que debes lavar tu barba a diario. Sin embargo, debes tener en cuenta que el vello de la barba es más grueso que el de la cabeza y que la piel facial es más fina y delicada que la del cuero cabelludo.

Por tanto, deberás emplear champús o jabones específicos que no interfieran en la regulación de los aceites naturales, responsables de la fortaleza y normal crecimiento de tu barba.

Aunque cada persona es un mundo, la pauta general es lavarla con estos limpiadores 3 veces por semana y el resto de días solo con agua. Siempre agua tibia para no resecar la piel en exceso y abrir los poros. Termina con agua fría para cerrarlos y potenciar el brillo de tu barba.

¿Sabes que la hidratación es el cuidado más importante? De ella dependerá que no experimentes picores o descamación y que tu barba crezca con fuerza. Para ello, existen aceites y bálsamos aftershave enriquecidos con aceites esenciales como el de jojoga, argán o pepitas de uva que evitarán el exceso de sebo en tu piel y brindarán suavidad y brillo a tu barba.

¿Sabes cómo debes aplicarlos? Aplícate la loción en ambas manos e hinca tus dedos en la barbilla llegando hasta la piel y sube repartiéndola hasta llegar a las mejillas. Después vuelve a bajar hasta el final de la barba y termina repartiendo el sobrante en el bigote.

¿La barba se debe peinar o cepillar?

Los especialistas coinciden en que se debe cepillar, en seco, y a diario, algo que muchos hombres desconocen.

Se debe evitar la salida de la ducha o del lavado de la barba para peinarlo, ya que al estar el pelo mojado es más vulnerable a las roturas y desluciríamos el volumen de la barba.

Si dispones de poco tiempo y recurres al secador, debes saber que no es saludable para tu barba si se convierte en una costumbre y que debes esperar a que el pelo se atempere para cepillarlo.

Utilizaremos el peine después de aplicar el bálsamo y no cualquier peine. Si tu barba no es muy densa elige un peine de dientes finos y juntos. Dado que el vello de la barba tiende a generar mucha fricción huye de los peines de plástico o con malos acabados. Son un reclamo para la electricidad estática y para atrapar pelos que después perderás.

Para lograr un agradable cepillado debes realizarlo poco a poco, sin tirones, de arriba hacia abajo y desde los laterales al centro. Si encuentras un nudo pásate los dedos y prosigue con el cepillado. De este modo, te aseguras que crezca en la dirección correcta.

Con estos sencillos tips y un poco de dedicación diaria no te costará presumir de barba a pesar del frío y de su amenaza para la correcta humectación de la piel. Por cierto, en 2018 las barbas siguen siendo tendencia, aunque en esta ocasión algo más cortas y definidas.