Xevi Verdaguer, prestigioso fisoterapeuta de Olot, dice que "unos buenos niveles de hormonas sexuales y de flora bacteriana te pueden cambiar la vida" y son claves para la salud.
La salud, también la emocional, tiene mucho que ver con las hormonas y con el aparato digestivo, que el fisioterapeuta llama segundo cerebro. Lo explica en conferencias y en foros de salud, y también a los pacientes que atiende en su consulta, donde aplica tratamientos personalizados e integradores con un equipo multidisciplinar formado por médicos, fisioterapeutas, nutricionistas y psicólogos.
Verdaguer es autor del libro Transforma tu salud. Las bacterias intestinales y las hormonas tienen la clave, en el que explica el significado de esta frase.
Hormonas. ¿Qué papel juegan en la salud emocional?
Las sexuales tienen mucho que ver con la fabricación de neurotransmisores, como la serotonina, o también conocida como hormona de la felicidad, que nos ayudan a estar bien emocionalmente porque afectan al cerebro. Su falta genera ansiedad y nos hace comer dulces, hace que estemos más tristes, más irritables, con ganas de llorar, que no descansemos bien por la noche, que tengamos más problemas de memoria e incluso que padezcamos estreñimiento o colon irritable, dolor de cabeza y contracturas y dolores constantes.
Los estrógenos, hormonas sexuales femeninas, nos ayudan a fabricar serotonina. Y otra hormona sexual, la progesterona, es también clave para la actividad del cerebro y la salud emocional, porque activa el GABA.
¿Qué es el GABA?
El GABA es un neurotransmisor que nos ayuda a sentir tranquilidad y relajación. Las personas a las que les falta GABA son nerviosas, impacientes, sufridoras, tienen problemas de angustia, ardor de estómago, contracturas, insomnio, dolor de cabeza en situaciones de estrés, etc.
¿La solución es una valeriana, un ansiolítico o tranquilizante químico?
No se trata de tomar antidepresivos químicos ni naturales. Si me preguntan qué es mejor, un trankimazin o una valeriana, yo digo que no se deberían tomar ninguno de estos comprimidos para fabricar GABA y sentirse más tranquilo. Esto depende de la salud hormonal, los estrógenos, la progesterona y el intestino.
Por lo tanto, tenemos que mantener las hormonas sexuales a niveles saludables y la flora bacteriana del intestino en equilibrio.
¿Qué papel juega el intestino en la salud emocional?
Gracias a estudios realizados en humanos y que a principios de siglo se hicieron en laboratorios, hoy sabemos que hay una serie de bacterias en el intestino que hacen elevar los niveles de serotonina y de GABA en sangre. Son bacterias que nos ayudan a digerir correctamente, a absorber los nutrientes, a fabricar vitaminas y minerales, y, además, también ayudan al sistema nervioso del intestino, el segundo cerebro, a fabricar estos neurotransmisores que favorecen una buena salud emocional.
Si no vas bien de vientre no estarás de buen humor ni tendrás buena memoria.
Como ya sabemos cuáles son las bacterias concretas del intestino que nos ayudan a mejorar la serotonina, si detectamos una falta podemos complementar el intestino con estas bacterias, con un suplemento probióticos o con alimentos que ayudan estas bacterias.
¿Qué tipo de alimentos favorecen la producción de serotonina?
La fabricación de serotonina no es exclusiva de la alimentación pero estudios recientes en humanos revelan que el sistema neurológico intestinal fabrica el 80% de la serotonina. Esto es así con una diversidad bacteriana equilibrada, y más aún si añadimos alimentos como el kéfir, arándanos, brócoli (cocido más de cuatro minutos) o germinado de brócoli, col o chucrut, semillas de lino y nueces.
Los alimentos que alteran el equilibrio o que generan inflamaciones en el intestino que reducen la producción de serotonina son el alcohol, los azúcares, los edulcorantes, los conservantes, los herbicidas y un abuso del trigo en personas sensibles a los inhibidores de la amilasa tripsina, una proteína presente en los cereales con gluten.
También se recomienda ejercicio físico. ¿Un deportista tiene mejor salud intestinal?
El ejercicio físico cambia la composición de nuestras bacterias en el intestino. El deportista fabrica más cantidad de serotonina y GABA y por eso tiene mejor salud emocional. Pero debe ser deporte de baja intensidad.
Ayudar a nuestra salud con suplementos que favorecen las bacterias intestinales, junto con recomendaciones alimentarias y ejercicio físico personalizado, nos puede cambiar la vida.