"Descomunal", "enorme", "gigantesco", "aquí cabe un campo de fútbol", fueron algunos de los comentarios que periodistas y militares expusieron a bordo del nuevo buque militar español A-06 "Ysabel" cuando fue presentado en Cartagena en su ceremonia de bienvenida.

Satisfacción plena en Armada y ET

La felicidad de recibir al nuevo buque era más que evidente entre todo el personal militar presente en el "muelle del carbón", en el Arsenal de Cartagena, ya fuera una satisfacción expresada por el Almirante Jefe de Logística de la Armada, Aniceto Rosique, o el jefe de logística del Ejército de Tierra (ET), general De las Hijas, y el más satisfecho de todos era sin duda el nuevo capitán del buque, el capitán de fragata Pedro Pérez Núñez.

Y es natural esta felicidad, pues con la llegada del "Ysabel" se llena un vacío en la operatividad naval española que ya duraba dos años.

"Ysabel" suple una necesidad

Es sabido que el ET tuvo buques de su propiedad, pero que manejados por la Armada, se dedicaban al transporte de toda clase de abastecimientos desde la península hasta cualquier destino donde hubiera tropas desplegadas: Melilla, Ceuta, Canarias, Baleares y las misiones en exterior eran los destinos cotidianos.

Esa tarea en tiempos inmediatos recaía en los buques "Camino Español" y "Martín Posadillo", cuando estos por pura obsolescencia por antigüedad fueron retirados del servicio en 2019 y 2020, el ET se forzó a cumplir esa tarea logística con buques civiles en los dos últimos años.

Uno de ellos era el bautizado como "Galicia" de la empresa Suardiaz, y que por los buenos servicios que desempeñó en esta labor de avituallamiento fue el escogido como nuevo buque logístico de la Armada.

Las tareas a cumplir

El barco, propiedad del ET, será operado por personal de la Armada y realizará tareas de transporte logístico tales como conectar por mar las ciudades de Ceuta y Melilla y los archipiélagos de Baleares y Canarias además de suministrar pertrechos y vehículos a todas las fuerzas españolas en misión internacional, ya sea en el Báltico o el Líbano por poner dos ejemplos.

El único inconveniente es que aunque el "Ysabel" duplica en capacidad de carga a sus dos predecesores juntos, es solo un barco para atender todos los destinos cuando antes había dos, por ello el almirante Rosique ya aventuró la construcción de un nuevo buque de transporte, aunque de menor porte.

El segundo mayor buque de la Armada

Construido en Vigo en 2003 y perteneciente a la naviera Sauriaz que lo empleaba como transporte de automóviles entre diferentes puertos mediterráneos y europeos, el entonces llamado "Galicia" y que navegaba bajo pabellón portugués, fue adquirido por el Ministerio de Defensa en diciembre de 2019 por valor de siete millones y medio de Euros, específicamente por sus grandes capacidades de transporte de vehículos.

Al necesitarse solo un buque de transporte y no de combate, con la carga tecnológica bélica que conlleva, es más económico y sencillo recurrir a un medio de segunda mano: probado, eficiente y con larga vida útil por delante, no menos de 25 años, que construir un proyecto propio.

Esta capacidad de carga, 16.361 toneladas, lo convierte en el segundo mayor buque de carga de la Armada solo superado por el "Juan Carlos I" en capacidad de transporte.

Por ello los comentarios respecto al tamaño del nuevo buque se sucedieron sin pausa en la presentación del nuevo barco, y lo cierto es que sus 150 metros de eslora, 21 de manga y 27 de altura, no desmerecían la admiración de los presentes, pero estos testigos se quedaron aún más sorprendidos cuando pudieron apreciar las capacidades de carga interior del nuevo barco, pues sus seis cubiertas pueden albergar 4.973 metros lineales de carga para vehículos ligeros y 1.288 para vehículos pesados.

En este aspecto hay que apuntar que en sus tiempos de transporte civil era hasta la impresionante cifra de 1.200 los turismos que podían albergar sus bodegas, ahora bien en esta nueva etapa de su vida más que coches deberá transportar camiones, blindados, carros de combate, cañones o todo terreno.

Modificaciones para uso militar

Por ello tras su adquisición pasó por un proceso de reformas en los astilleros de Navantia en Ferrol. En los que se eliminó una de sus cubiertas para ganar espacio en altura por lo que ahora cuenta con seis de la siete originales, junto con rampas nuevas para soportar el peso de los blindados y soportes en las cubiertas, "patas de elefante" en argot, para anclar en ellos los vehículos pesados, que serán la razón principal de uso del buque el transporte de vehículos y pertrechos, no de personal.

El buque fue repintado en gris naval y su nombre primigenio de “Galicia” fue borrado para darle el nombre y numeración concreta de la Armada A-06 "Ysabel", en honor de las heroínas españolas que han tenido ese nombre, desde Isabel I de Castilla a la cofundadora de Buenos Aires Isabel de Guevara entre otras.

Como en castellano antiguo la ortografía del nombre se escribía con "Y" inicial se ha conservado el nombre de "Ysabel".

Transformaciones inmediatas

Habida cuenta que el incorporado "Ysabel" no es un buque de combate como tal sino un transporte solo recibirá como armamento una dotación de ametralladoras o cañones ligeros para defensa inmediata contra abordajes.

Pero seguirán otras modificaciones para militarizar el barco, como cambiar su sistema de comunicaciones de civil a militar, sistemas de guerra electrónica, mejorar sus sistemas de supervivencia y resistencia estructural además de mejorar su habitabilidad.

Pues aparte de sus 51 tripulantes deberá alojar a los conductores de los vehículos que embarque en cada travesía, por ello deberá disponer de alojamientos extra, aún por construir.

Por ello aunque ya entregado y en servicio, las obras de acondicionamiento continuarán en el navío hasta septiembre de este año en que se prevé que recoja a una agrupación de la guarnición de Ceuta para que en la península realicen unas maniobras ya programadas. Será ese bautismo operativo el que nombre al "Ysabel" como un verdadero buque de guerra.