Antes de que comience el último fin de semana antes de que se dé el pistoletazo de salida a la Navidad, el Gobierno de España ha decidido mantener las restricciones en todo el territorio nacional durante este periodo festivo. No obstante, ha manifestado su alta preocupación ante los últimos datos sobre el número de contagios del virus. Por este motivo, han visto necesario aclarar que “la situación en estos momentos se complica”.

Aunque no han detallado de si podrían cambiar las medidas de protección ante un avance de la pandemia de la COVID-19 durante estos días tan especiales del año.

En este sentido, tan solo han puesto de manifiesto que tienen la potestad para poner en marcha medidas más restrictivas si la curva de contagios no es tan satisfactoria como desearían desde la administración central.

Relajación en algunas comunidades autónomas

El ministro de Sanidad del gobierno del PSOE con Unidas Podemos, Salvador Illa ha achacado esta preocupación al hecho de que ha habido una mayor relajación por parte de la población en algunas comunidades autónomas durante los últimos días. Aunque tampoco en este caso ha querido identificar a estos territorios y tan solo se ha limitado a poner sobre la mesa que “las cosas no van tan bien como quisiéramos todos”. Entre las medidas que se han relajado se ha referido a las limitaciones de movilidad o la restricción de aforos en establecimientos de la hostelería.

Al igual que el hecho de que Madrid dispondrá de 300.000 vacunas.

Restricciones: efectos del virus en el Puente de la Constitución

Otro de los aspectos más relevantes a los que se ha referido Salvador Illa durante su encuentro con los medios de comunicación es el que tiene que ver con la incidencia del virus durante el pasado Puente de la Constitución.

Ha llegado a manifestar a que “todavía no se ha observado los efectos de este patógeno en este periodo”. Un factor que lo considera como “altamente preocupante” debido a que los datos en el número de contagios en estos días se han elevado respecto a periodos anteriores.

No es partidario de las venta en farmacias de los test rápidos

Por otra parte, el político catalán ha querido dejar muy claro antes los medios que no considera que sea una medida muy oportuna que los test rápidos para identificar el patógeno sean vendidos en las farmacias. “Puede llevar a un engaño” ha aclarado el ministro para argumentar su postura sobre este aspecto. Al poner de manifiesto que las personas pueden dar negativo en ese preciso momento, pero pocas horas más tarde pueden generar contagios a otras personas, incluso dentro de la misma unidad familiar. También ha mencionado que este sistema de detección en el Coronavirus puede crear un falso estado de confianza y “que no corresponde con la realidad de este proceso”. Tal y como era el deseo de la Comunidad de Madrid.