La noticia se ha conocido ayer, martes, fecha en la que se esperaba una resolución de la Fiscalía alemana. La acusación ha pedido que se extradite al expresidente catalán a España y que, mientras se realiza esta gestión, aguarde en prisión. Esto último lo justifica con considerar que existe riesgo de fuga por parte de Carles Puigdemont.
El pedido se ha realizado durante la mañana de este martes en la Audiencia Territorial de Schleswig. Territorio en el que fue detenido el 25 de marzo, cuando el expresident regresaba a Bruselas. Un día después de su arresto, un Juzgado de Primera instancia decidió que el expresidente esperara en prisión la decisión de la Fiscalía.
En el documento presentado por la Fiscalía, reconoce que el delito que se le imputa a Puigdemont es similar al de alta traición que contempla el Código Penal alemán, aunque sostiene, que las coincidencias no son exactamente literales.
Con respecto a la acusación de malversación de fondos, delito que también se le imputa al líder separatista se corresponde al mismo delito que se legislado en la regulación alemana.
Ahora deberá la Corte analizar y evaluar si las acusaciones que realizadas por el Tribunal Supremo pueden ser juzgadas en Alemania.
