La anunciada visita del presidente Obama a Cuba, ha generado opiniones de todo tipo; por una parte algunos cubanos en los EEUU, expresan su desacuerdo porque exigen el fin de la dictadura castro-invento-comunista y a su favor el poco esfuerzo que en este sentido ha hecho el desgobierno cubano para facilitar el camino del restablecimiento y el fin de la guerrita de más de 55 años, pues continua sin modificar las libertades fundamentales, persiste en la represión y de vez en vez hace señales débiles de algún que otro cambio, mientras ahora se centra en realizar algunas mini-acciones para agradar a las múltiples medidas que el presidente Obama ha impulsado en esta apertura.
En otro borde del espectro de opiniones, esta un grupo no poco numeroso, cansado de una guerra de más de 55 años, sin otro resultado que rodear su existencia terrenal, de pobreza y dificultades, con lemas y consignas cada vez menos creibles y sobre todo en este grupo, está el cubano de a pie, que ya hace tiempo dejó de creer en promesas del Gobierno, en las campañas de invasión imperialista y ve la actual situación como un beneficio, para el enriquecimiento de la élite y de los empresarios familiares y militares del gobierno, pero la única válvula de escape para recuperar una esperanza que ya hace años había perdido, y la única que trae ciertas perspectivas de un cambió futuro, para bien o para mal, pero un cambio que después de tantos años, sin nada nuevo que contar, cualquier mortal agradece.
Los más radicales en los EEUU, tratan de sabotear el proceso y apostar todo al derrumbe de la dictadura castro-invento-comunista, pero a pesar de sus años de exilio y de vida muchas veces modificado por la guerrita contra el gobierno cubano, la evaluación por resultados, apuntan a ser una politica fallida, con más de 50 anõs de evidencia científica.
Los que se acercan a la apertura, ya están convencidos de que hay que cambiar la política para lograr que el invento desaparezca y eso solo se logra con apertura, no importa si el castro-invento-comunista lo sabe y se cuida, Obama mira para otro lado, cuando trata el propio gobierno cubano de sabotear con exigencias absurdas para el momento histórico el nuevo camino o cuando incrementa la represión a los opositores y lesiona las libertades esenciales, Obama continua al frente, al parecer cediendo, pero al final ganando, lo que nadie habia ganado en la batalla contra el “invento”.
Todos sabíamos que cuando EEUU diera estos pasos aparecerian muchos tras-pies por la parte cubana, pues el gobierno prefiere vivir y morir como ha vivido y ya el pueblo hace tiempo le importa poco, pero nunca se nos habia ocurrido que el presidente del “gran imperialismo yanki”, tuviera la calma y la tolerancia que ha demostrado, para avanzar con este proceso histórico y con la seguridad de que mas del 90% del pueblo cubano agradece, aún cuando le impongan decir otra cosa o la digan en su nombre. “Gracias Obama”.