Los problemas del Rey de España, Felipe VI, se agravarán el próximo día 3 de febrero con la solemne apertura de la XVI legislatura del Congreso de los Diputados. Tras la decisión de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) de negarse a asistir a este acto. Así lo ha puesto de manifiesto la dirección de los independentistas catalanas y por parte de su cabeza visible en Madrid, Gabriel Rufián.

Será la primera vez que un grupo político esté ausente en la apertura del Congreso desde que se instaurase la democracia en 1978. Los motivos a los que alude ERC para estar ausente en este acto son dos.

Por un lado, el hecho de que sus máximos dirigentes estén en la cárcel, entre ellos el secretario general del partido Oriol Jorqueras. Y por otro, el discurso “tan duro contra las posiciones nacionalistas que lanzó el hijo de Juan Carlos I el 3 de octubre de 2017 y que ha provocado un enorme descontento en la figura del monarca por parte de la izquierda catalana. Hasta el punto de que en un comunicado de prensa no consideran “interlocutor válido” al actual Rey de España.

No estarán solos en su feo a Felipe VI

De todas formas, Esquerra Republicana de Catalunya no se encontrará solo en su postura de rechazo a la monarquía española. Ya que en un comunicado, la CUP también ha anunciado que ese día estará fuera del hemiciclo.

En este sentido, hay que recordar que ambas formaciones políticas ya expresaron sus intenciones al no participar en las consultas en La Zarzuela para tratar el tema de la investidura.

Dudas sobre la decisión de Bildu, BNG y JxCat

De cara a la sesión legislativa queda por saber cuál van a ser las posiciones que tomen los restantes grupos independentistas vascos, catalanes y gallegos.

En este sentido, las direcciones de Bildu y BNG van a analizar en los próximos días cuáles van a ser sus posturas respecto a su presencia a este acto tan significativo de la vida política nacional.

Mientras que por otra parte, la decisión de JxCat dependerá de que pueda haber algún gesto por parte de las instancias judiciales respecto al “procés” de Cataluña.

Aunque todo indica por el momento que también son partidarios de plantar al Jefe de Estado en esta jornada tan especial. El PNV, por su parte, y como viene siendo habitual en todas las legislaturas ocuparan sus escaños ante el discurso real.

En total podrían ser 21 los diputados que decidan ejercer este rechazo. Contrastando con su respaldo a la formación del gobierno de Pedro Sánchez, bien con sus votos afirmativos o sus abstenciones. Siendo la primera vez en la historia de España que hay un rechazo de estas características ya que tan solo los representantes de Herri Batasuna protagonizaron esta postura en la década de los años 80 y 90. En cualquier caso, supondrá un nuevo punto de discusión entre el gobierno de coalición y la oposición de derechas PP, Ciudadanos y Vox.