13 de Noviembre de 2015, sala Bataclan, un teatro con aire de Pagoda china en el corazón de París. El ataque comenzó a las nueve y cuarenta y cinco de la noche. Momento en que cuatro hombres, armados con kalashnikov, entran en la sala del concierto.
Una escena que duró 2 horas, 38 minutos y 44 interminables segundos. Silenció los acordes del rock californiano de "Eagles of Death metal", segó la vida de 90 personas y dejó marcado de por vida a Ramón González.
Ramón González un superviviente y nuevo escritor
¿Quién es Ramón González? Os lo preguntareis muchos.
Ramón González nacido en Daimiel en el año 1984 y licenciado en en Ingeniería Química por la Universidad de Castilla la Mancha, es uno de los supervivientes de esa masacre y autor del nuevo libro "Paz, Amor y Death metal".
Ramón González empezó a escribir asesorado por psicóloga que lo atendió en urgencias, la noche de los atentados, para poder sobrellevar uno de los episodios más duros y horrible de su vida. En el momento de empezar este libro que hoy nos presenta, se encontraba sumido en una terrible depresión, por lo cual sufría muchos cambios de ánimo. Sufría muchas pesadillas, no le era posible ir al trabajo y menos estar en lugares públicos llenos de gente, poder escribir este libro hizo que al fin fuera capaz de concentrarse en algo desde el brutal atentado.
Siempre había querido escribir pero nunca había tenido ni el tiempo ni la inspiración necesaria para llegar a plasmar en papel lo que circulaba por su cabeza.
Sus ganas de partirle la cara a Arturo Pérez-Reverte
El libro se encuentra dividido en tres partes donde relata el camino que llevó a Ramón González hacia la reconstrucción de su vida, incluso llegando a abandonar su trabajo en una consultoría informática para ser profesor, algo que realmente le apasionaba.
En "Paz, amor y death metal" relata la historia de esa noche en la sala Bataclan de París, desde cómo acabó tirado en el suelo intentando salvar su vida, la de su novia y la pareja que les acompañaba, hasta cómo acabó viendo la vida desde otra perspectiva llegando a valorar mucho más la vida y dándole realmente importancia a lo que realmente la tiene.
Podéis leer cómo se sentía antes, durante y después del atentado y cómo llegó a sobrellevar la situación queriendo en su día llegar a partirle la cara al Arturo Pérez-Reverte por tuits como este: "Interesante, el deseo de vivir del ser humano. ¿Y si los centenares de la discoteca se hubieran abalanzado sobre los del kalashnikov...?"