Este año parece no ser el mejor para la realeza española, en especial para Doña Letizia y Don Felipe: escándalos, chismes, rumores de divorcio… Y ahora la cereza que corona el pastel: se empieza a perder el respeto hacia la figura del Rey.
¿Sabías que antes era ilegal quemar las fotos del Rey de España? Bueno, no importa si estabas enterado o no, porque la Audiencia Nacional acaba de decretar que ya no está penado destrozar públicamente las imágenes de Felipe VI.
Aunque no lo creas, ahora es legal acabar con las imágenes de Don Felipe, si este o sus políticas no son de tu agrado.
Mientras no agredas a nadie, no tendrás ningún problema. El nuevo decreto lleva a miles de personas a preguntarse: ¿Es esta una victoria para la libertad de expresión o es que la Corona empieza a tocar fondo?
Expresiones simbólicas
Hace un par de meses, un grupo de españoles se reunieron a celebrar los reproches y recriminaciones que hizo el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) a España, por arrestar a los jóvenes que decidían destruir las fotos de los reyes en manifestaciones.
En medio del festejo público, se quemaron fotos del Rey Felipe y la Reina Letizia, lo que provocó que empezaran a abrirse denuncias por “Injurias contra la Corona” a los jóvenes que participaron en la concentración.
Sin embargo, tras reflexionar, la Audiencia Nacional ha determinado que quemar fotos no es un ataque personal contra la familia real, sino una forma simbólica de expresar descontento hacia las personas que la conforman. El juez de la Audiencia Nacional, José De la Mata, ha dicho claramente que despedazar las fotos del Rey es: “Una crítica a lo que el Rey representa y corresponde a la expresión de un rechazo a la monarquía como institución.” De esta manera, las denuncias fueron archivadas.
Los Derechos Humanos y la libertad de expresión
Todos tenemos derecho a quejarnos y a criticar, es lo que nos asegura el TEDH. De la Mata se muestra de acuerdo con esta afirmación y explica que quemar fotos de la monarquía española no es más que libertad de expresión. “Precisamente cuando se exponen ideas que molestan, ofenden y cuestionan el orden establecido es que la libertad de expresión es más valiosa”, comentó el juez.
No obstante, sabemos que la libertad de expresión también tiene un límite. Y es que no está permitido publicar o enviar mensajes que inciten a la violencia o al desorden estatal, y muchísimo menos durante las protestas civiles. Respecto a esto, el juez De la Mata ha aclarado que en la última manifestación no hubo ninguna expresión de odio o intención de agredir a los gobernantes, que ahora no podrán reclamar si los ciudadanos rompen o arruinan sus imágenes en las calles.