Desde que la Agencia Espacial norteamericana o Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio NASA (por sus siglas en inglés) comenzó su programa de búsqueda de vida inteligente en el espacio exterior, desde los años setenta, a través del SETI; organismo que lleva diversos proyectos con el propósito de encontrar vida extraterrestre, la opinión pública no ha parado de recibir, aunque al principio con bastante cautela, multitud de noticias y hallazgos importantes y dignos de reconsiderar a la luz de propósitos de supervivencia de nuestra especie.

A principios de 2017, NASA a través de su portavoz y autor del estudio, Michael Guillón preparó una conferencia de prensa donde se dieron a conocer a la opinión pública los detalles del hallazgo de un nuevo sistema solar, en la constelación de Acuario, a tan sólo unos 40 años luz de la Tierra. Guillón describió este nuevo sistema solar con planetas de características muy similares a la Tierra, con grandes posibilidades de albergar agua. Se trata de tres planetas alrededor de un astro del tamaño de Júpiter. La proximidad de estos planetas a su estrella tan similares a la Tierra, les hace para los científicos aptos para el desarrollo de la vida.

Importantes hallazgos del SETI en su búsqueda de vida extraterrestre

Los investigadores del SETI se han decantado por una búsqueda todavía más precisa que permita encontrar, identificar e incluso contactar con otras formas de inteligencia fuera del planeta. En este sentido, sus esfuerzos no siempre han alcanzado la ansiada recompensa.

Sin embargo, en los últimos años SETI ha desarrollado importantes proyectos que permiten incluso a los usuarios de Internet interactuar con el programa.

Este proyecto denominado SETI@Home permite transmitir en la red la información captada por el radiotelescopio de Arecibo, en Puerto Rico. Hasta la fecha no se han podido comprobar señales de vida inteligente, de acuerdo con los resultados de las investigaciones arrojadas por el SETI, a excepción de la famosa señal WOW recibida en agosto de 1977 y de la que aún no se han obtenido resultados concluyentes.

Mudarnos de casa y las cuestiones importantes

Aunados estos dos hechos, es imperativo evaluar el objetivo del gobierno americano que es el que auspicia y avala económicamente dichos proyectos y organizaciones, de buscar una nueva casa para mudarse, es decir abandonar el planeta Tierra como vivienda habitual; nadie busca una nueva vivienda si no tiene la intención de abandonar la que habita. Lo que lleva inevitablemente, a plantearse una serie de cuestiones de trasfondo muy serio.

En primer lugar, es importante cuestionarse las motivaciones originales de la administración gubernamental americana para llevar a cabo estas investigaciones y proyectos. Esto no resulta una tarea sencilla si la información que recibimos estuviera de alguna manera, parcializada, o si acaso, no estuviera llegando de manera plena hasta la opinión pública.

Esto se podría pensar de esa famosa señal Wow.

Lo que sabemos de ella es realmente muy poco, sólo se ha ofrecido una minuta muy breve de carácter más desconcertante que informativo, en la que apenas se nos dice que se trata de una señal de origen desconocido que ha llevado a una serie infinita de suposiciones y especulaciones, sin fundamento ni conclusión satisfactoria. Llamar la atención sobre estos acontecimientos y proyectos que tienen apoyo gubernamental es de suma importancia para el ser humano como especie. No se trata de llevarnos a especular sobre los posibles orígenes extraterrestres de una señal recogida del espacio para concluir que en realidad, no estamos solos en el universo, o que estamos rodeados de vida extraterrestre desde siempre sin saberlo.

Es nuestra responsabilidad plantearnos muy seriamente por qué y para los intereses de quién es necesario buscar otros planetas, e invertir tanto dinero y esfuerzos en programas que requieran tales pesquisas, en lugar de emplear esos mismos esfuerzos y activos en implantar y apoyar protocolos de conservación de los recursos y utilización de las técnicas y energías limpias que ya se conocen.

Se trata de tomar una iniciativa responsable, de manera individual por un cambio global, que no beneficie únicamente los intereses de gobiernos cuyas políticas están en decadencia y no representan los intereses de la mayoría. Al fin y al cabo, se trata de merecernos la vida en la Tierra, defendiendo nuestro patrimonio natural; si es que realmente lo apreciamos.