Coincidiendo con la celebración del Orgullo Gay, uno de los países no musulmanes en donde la Homosexualidad es más perseguida, Rusia, ha ideado por medio de un canal televisivo de la Iglesia Ortodoxa una proposición para la población LGTB rusa que ya inquieta a ésta. El canal está financiado por un simpatizante de Putin próximo a la Iglesia Ortodoxa que él mismo compara con Fox News de EE.UU.

"Buen viaje, pervertidos"

Tsargrad TV nombre del canal, por medio de su presentador estrella, Andrei Afanasiev y un vídeo titulado “Buen viaje, pervertidos”, con el típico aire de superioridad más propio de Estado Islámico, propone pagar de su bolsillo billetes de avión sólo de ida para homosexuales.

Dirigiéndose a ellos con adjetivos semejantes, dice que el billete sólo se dará a quien presente un “certificado médico que demuestre que eres sodomita o tienes alguna otra forma de perversión”. Afanasiev ha declarado al diario El Mundo que “cualquier psicólogo puede dar esa certificación”.

Dicha sugerencia paradójicamente no ha sentado nada bien en Rusia a pesar de que la mente del ruso medio sigue considerando enfermo a un homosexual y Afanasiev ha recibido muchas críticas.

Se defiende diciendo: “Hay mucho odio e histeria, me escriben muchísimas personas insultándome”. En el vídeo se dice que se perdona al pecador y se odia el pecado. La sugerencia incluye que los homosexuales puedan irse a países como Estados Unidos. Ello es por que el Estado de California ofreció asilo político a los gays rusos que sean perseguidos en su país natal por su orientación sexual.

Cuatro años ya de la Ley homófoba rusa

Hace cuatro años que se aprobó una Ley rusa que persigue “toda propaganda homosexual”, incluyendo obsesivamente la “protección a los niños” (con el pomposo nombre de “Ley Federal con el Propósito de Proteger a los Niños de Información que Niega los Valores Familiares Tradicionales”) ha aumentado los ataques al colectivo LGTB, con asesinatos incluidos.

Una Ley tan nociva como la otra que tolera la agresión de género en los matrimonios, impuesta por la Iglesia Ortodoxa, en su paranoia de “evitar la destrucción de la Familia”, creyendo que la salva con tolerar el maltrato en el seno del matrimonio.

Uno de los diputados rusos en promover la Ley nombrada en primer lugar, Vitali Milónov, no sólo la defiende con la fe religiosa digna de un fanático, sino que llega a atacar a los países occidentales que aprobaron el matrimonio gay como España. Pero resulta ser un cursi al decir que “España puede cambiarle el nombre a la Luna y al Sol, pero ello no significa que el Sol deje de ser Sol y la Luna deje de ser la Luna”.

Asimismo, calumnia a Occidente con que: “desde Europa se apoya a los movimientos de los gays en Rusia.

Su objetivo es recibir un puñetazo en el ojo y decir que son víctimas del Régimen y de un gobierno homófobo”. Llega a decir que las ayudas occidentales a los gays rusos son “satánicas”.

Un país como la Rusia actual, donde la degradación moral es tal que hasta se ve bien entre su población que se emitiera en la televisión un concurso en el cual para ganar hay que liquidar a los contrincantes (y no es una metáfora), sería un perfecto escenario para un remake ruso de la película “Elle” de Paul Verhoeven, donde el aparentemente tímido y atormentado marido de una fanática religiosa violaba a la protagonista en su primera escena.