Pertenezco a ese grupo de españolitos que utilizan la SANIDAD PRIVADA. No por ser superior a nadie, sino porque considero que tengo la suerte de poder pagar una pequeña cantidad extra al mes para que mis visitas al doctor (pocas) sean más ágiles, de esta manera puedo adaptar mis visitas al médico con mis horarios laborales, y no al revés. No pierdo horas de trabajo y ayudo a la sanidad pública a que atienda mejor al resto de los ciudadanos que no se pueden permitir este lujo.
En mi barrio acaban de inaugurar un nuevo Centro de Salud, y debido a unas molestias severas en la rodilla, decido, después de doce años sin pisar un ambulatorio de la sanidad pública, solicitar cita.
La cita me la dieron 8 días después. En ocho días la molestia de mi rodilla fue aumentando, y mucho. La doctora que me atendió, obviamente sobrepasada de trabajo, me mandó al traumatólogo, con una fecha para después de cinco meses de la consulta.
Lógicamente, entre quedarme en casa sin poder andar o llamar a mi Seguro Privado de Salud y solicitar cita directamente con un traumatólogo dentro de dos días, ustedes entenderán cuál ha sido mi opción. Mi salud frente a cualquier otra cuestión. La sanidad privada funciona para estas cuestiones. Otra cosa es la necesidad de atención médica 'urgente'.
En una conocidísima clínica privada de la ciudad de Alicante, los fines de semana hay una única enfermera (o auxiliar de enfermería, no lo tenemos claro) cada 27 habitaciones.
Y el único médico de guardia es el mismo médico que atiende la UCI de este hospital. Solicitar un médico a una habitación para cualquier dolencia extraña es poco menos que imposible y entre la dirección del hospital y las diferentes compañías de seguros rivalizan a echarse la culpa unos a otras y otras a unos por la falta de atención médica.
¿Se imaginan ustedes asistir a un infarto en una habitación, a la vez que un ahogo de un paciente, mientras en urgencias entran dos accidentados? ¿A quién se atiende primero? ¿A quién no se atiende? Reclamaciones hay muchas. Las respuestas, en el caso personal de lo que hablo, es de chiste. Una reclamación de tres folios, con fechas, horas y nombres de médicos, hablando del trato incluso inhumano a un enfermo, se nos responde que 'todo está en orden'.
La reclamación de la falta de servicio médico y la no asistencia de un médico pese a las peticiones continuas de los familiares, son respondidas por parte de la clínica echando la culpa a la compañía de seguros. El resultado final fue el fallecimiento del enfermo. La respuesta de la clínica privada no olvidemos que es un negocio, es inexistente. Tres folios de reclamación se traducen en una única frase "hubo valoración médica diaria".
La 'valoración médica diaria' se refiere a la visita de un médico, sin entrar a la habitación a ver al paciente, ya que pertenecía a otra compañía. Triste que las Autonomías y el Gobierno Central consientan el desmantelamiento de la sanidad pública para que empresas privadas 'ganen' dinero maltratando en algunas ocasiones a sus propios trabajadores con horarios insufribles, y tratando a los enfermos como 'meros números'.
Nos queda la pataleta, el hacer público lo que ocurre, y en su momento iniciar una demanda con la ayuda de las Asociaciones de Ayuda al paciente. Frente a una urgencia, no se lo piensen, acudan a la Sanidad Pública. Y reclamen más dinero para mejorarla. Frente al trato poco profesional y con carestía de servicios médicos de la sanidad privada, rebélense, pidan, soliciten e insistan en respuestas frente a la falta de médicos. ¡No tengan que arrepentirse después!
No incluyo nombre de personas ni la clínica en este artículo por ética, pero la falta de médicos, de enfermeros y de calidad humana, todo basándose en un negocio que versa sobre la salud de un ser humano' debería de reglamentarse a otros niveles legales.
¿Dónde están las inspecciones laborales para descubrir cuántos médicos son necesarios para 'x' número de pacientes? ¿Y cuántas enfermeras? ¿Qué responsabilidad tiene una clínica que acepta a un paciente de una compañía de seguros y luego no manda a un médico de urgencia por que esa compañía no tiene a un médico para estos menesteres?
¡Ojito con la sanidad privada en aquellas clínicas de ciudades no muy grandes! ¡Miedo me dan!