Ya entramos en la nueva era hace largo tiempo. La era de la sociedad del conocimiento y la información masiva y quizás sea el momento de detenernos un rato y comenzar a reflexionar.
Esta era contiene una gran paradoja: la sociedad del conocimiento no es la sociedad en que el conocimiento tiene valor, ya que hoy en día, a través del teléfono móvil o de un ordenador, podemos acceder a todo el conocimiento del mundo instantáneamente y sin sabiduría y una apropiada crítica o reflexión, podríamos darlo todo por bueno, además de no llegar a aprehender realmente el significado más auténtico de las cosas, si es que lo hay.
Lo importante no es el conocimiento, sino la sabiduría, algo que no se puede describir en un texto.
Hay que estimular la inteligencia colectiva y es muy importante saber cómo crearla, siendo los Videojuegos (especialmente en sistema online) junto con las TICS en general, los que últimamente nos están ofreciendo muchas e interesantes posibilidades.
La revolución 2.0 ha creado un nuevo mundo: la sabiduría de una multitud. Si preguntas a una comunidad experta en un tema, se crea una discusión (que puede ser una fuente de sabiduría), y de ahí sale, y normalmente se llega, a una idea mejor que la de un solo experto (como ocurre en el caso de los foros). Antes, lo habitual era que la innovación procediera sólo de unas pocas personas con talento, o de un único genio, pero esto ya está algo desfasado y es el momento de estimular y aprovechar la sabiduría de la comunidad, la inteligencia colectiva, siempre claro está, con fundamento y sentido común.
El campo de los videojuegos, junto con otros como el cine y demás medios audiovisuales, comprende un amplio espectro de conocimientos (hay juegos educativos, de estrategia, de ciencia, arte, simuladores de vuelo, estamos en vías de explotar más y más la realidad virtual, y la realidad aumentada...), que están íntimamente relacionados entre sí, para crear un producto final mucho más rico.
Probablemente, a pesar de que el ser humano tienda a separar, clasificar, enumerar conocimientos (que no está del todo mal), el universo en su conjunto se encuentra y no dejará de estar interconectado, como un videojuego donde el arte, la música, la programación, la narrativa, entre otras áreas, conforman un producto final y esto no deja de ser algo realmente hermoso y enormemente positivo.