La sala Clandestino abría sus puertas alrededor de las 21:00 horas, el público comenzaba a entrar. Pronto la sala se encontraba llena completamente, con un aforo y venta de entradas agotados, mostraba una noche histórica para vivir de la mano de Despistaos.

La velada comenzaba a las 21:30 horas con el artista Currice, que aprovechó al máximo la media hora que se le concedió.

Salió al escenario calentando a la muchedumbre que se encontraba allí. En esa media hora, transmitió esa gran fuerza y potencia de la que están cargadas sus canciones.

El público, ya cargado de energía, esperaba ansioso. El tema “Estamos despiertos” daba comienzo al espectáculo, seguido de las canciones “Lo que hemos vivido”, “Estrella”, “Te quedas a mi lado” y “En tus manos”. La noche siguió su curso y se pudieron escuchar temas como “Resucito” y “A la luz de tus piernas”, que muestran la marca de identidad de la banda Despistaos.

La noche prometía y tampoco se podían olvidar de canciones como “Lo contrario de ninguno” y “Las cosas se me olvidan”, de su último trabajo, “Estamos enteros”.

Durante el concierto, reinó el ambiente festivo; se notaba la complicidad del grupo con los asistentes.

Uno de los momentos más especiales de la noche llegó cuando Dani pidió a los asistentes que encendieran las linternas de sus teléfonos

Y tras un silencio inmenso que inundaba la sala, comenzaban a sonar las primeras notas de “No”. Los asistentes coreaban la canción al mismo tiempo que movían los teléfonos creando un ambiente mágico y luminoso.

Con el tema “Gracias”, una de sus canciones más adoradas, llegó el adiós puntual. El grupo se fue y tras dos minutos donde se notaba el nerviosismo del público, salía Krespo acompañado de su guitarra y su armónica para interpretar el tema “Un beso y nada más”.

Tras este tema salían todos los componentes del grupo para interpretar “Quién te acompañará”.

Aprovechando la compañía del artista Currice, Delicaos tocó “Estoy aquí”, que interpretaron todos juntos sobre el escenario

Ya con los motores calientes, y finalizando la velada, comenzaban a sonar las primeras notas del tema “Física o química”; el público enloqueció y de manera unísona comenzaba a corear la canción, creando un espectáculo digno de ver. Y como no podía ser de otra manera, llegaba el final del concierto con “Cada dos minutos”, donde los componentes del grupo daban sus últimos toques de energía y donde el público pedía más.

Finalizaba el concierto con la presentación de los componentes del grupo y con las últimas notas de este tema. Y con él deciden poner el broche final a la brillante velada. Un gran final para un concierto de 120 minutos en el que dieron mucho de qué hablar. Fue una noche especial, de principio a fin.