La resiliencia es la capacidad que tiene una persona de poder adaptarse en forma positiva en situaciones difíciles. No todas las personas son iguales, a unas les afecta ciertas cosas, mientras que, a otras, esas mismas cosas no parece importarles.

Algunas personas son más tranquilas, ya que son menos nerviosas. Ellas toman las cosas con calma y afrontan las situaciones difíciles de una manera equilibrada Estas personas posiblemente tiene el don de la resiliencia.

¿Te has preguntado alguna vez si eres una persona con resiliencia?

Si no has pasado por una situación difícil o traumática, es posible que no estés seguro si gozas de esta capacidad.

La resiliencia ocurre en medio de situaciones estresantes, ahí es cuando la persona actúa de acuerdo a su capacidad. Una persona resiliente tiene una mayor capacidad de adaptación y supera más fácilmente los obstáculos que otra. Pero, una persona resiliente no es nada más aquella que supera obstáculos, sino que después de ese obstáculo la persona manifiesta valores como la autoconfianza, fortaleza, impulso a ir hacia delante, buena reflexión y aprendizaje tras lo sucedido. A veces, una persona resiliente se puede confundir con ser una persona indiferente.

El estudio de la resiliencia

El concepto de resiliencia es estudiado de una forma más profunda. Algunos creen que la resiliencia es un proceso mientras que otros creen que debe ser un resultado.

En el primer caso los estudios se enfocan en la capacidad que tiene la persona de hacer frente a la adversidad en el momento en que ocurre. Mientras que, en el segundo caso, algunos otros estudios creen que la resiliencia debe ser un resultado porque se trata de personas que tras pasar por un momento difícil continúan mostrando conducta equilibradas y emociones positivas.

Lo que sí es cierto es que la resiliencia es una gran habilidad que permite ver al mundo de una manera distinta. Es enfrentar al mundo con optimismo.

Cómo podemos ser más resilientes

La resiliencia no es algo con lo que se nace, es algo que se puede adoptar a lo largo de la vida, aunque hay algunas personas que tienden a ésta conducta a través de la genética.

Las personas resilientes son aquellas que practican lo siguiente:

Son conscientes de sus capacidades y limitaciones. El conocerse a sí mismo es una herramienta para hacerle frente a las adversidades las personas resilientes saben de qué son capaces y usan sus mejores virtudes y esfuerzos para manejar cualquier situación.

Son creativas. Las personas resilientes buscan crear de lo negativo algo positivo, siempre tratan de ver el lado bueno de las cosas y olvidarse de lo que ya no se puede arreglar. Continúan con lo que tienen y tratan de mejorar para el futuro.