Dos años han pasado desde que The Weeknd pegase un pelotazo más que premeditado con el lanzamiento de Starboy, el disco que le catapultó definitivamente a la élite de la música comercial. Desde entonces, su carrera se ha convertido en una sucesión de featurings con estrellas como Daft Punk o Kendrick Lamar, colaboraciones con conocidas firmas de moda, y sonados vaivenes sentimentales. Ahora y como si de una expiación se tratase, Abel Tesfaye (nombre real del cantante), vuelve sin avisar con My Dear Melancholy, una oda al desamor conformada por seis únicos temas que nos retrotraen a sus inicios.

El retorno de la faceta más oscura de The Weeknd

Trilogy y Kiss Land son los títulos de sus dos primeros trabajos de estudio, los responsables de que allá por 2012 se ganase el respeto de la crítica independiente gracias a una onda profundamente sombría y cruda nunca antes vista en el R&B. Letras explícitas sobre drogas, sexo y delincuencia, que contrastaban con una voz dulce e impecable similar a la de Michael Jackson, hicieron de Tesfaye el icono alternativo sobre el que tener la mirada puesta. De aquella etapa nos quedan High For This o la profética Rolling Stone, canciones consideradas de culto por algunos, y cuyo sonido no diverge en absoluto con el de las recién presentadas I Was Never There y Wasted Times.

La banda sonora pausada de un corazón roto

En My Dear Melancholy, el canadiense deja de lado la atmósfera de pop bailable que Starboy rezumaba. El nuevo mini álbum abre con Call Out My Name, quizá el más fácil de todos los temas pero que con un estribillo tan coreable como desgarrador, sienta las bases de lo que en conjunto acaba siendo el trabajo más íntimo y sincero de The Weeknd.

Try Me, con una base más hip hop, confirma la línea tanto musical como temática: nos habla de una relación acabada y de la desesperación por parte de Tesfaye por querer a su chica de vuelta.

Quizá la única gran diferencia de este Abel con el de hace seis años, sea la carga de sensibilidad: ahora sus letras hablan de amor, no de deseo ni de una simple atracción.

Sus romances y correspondientes rupturas con la modelo Bella Hadid, y más recientemente con Selena Gómez, parecen las más evidentes razones detrás de este cambio.

Gesaffelstein, pieza clave en la renovación de un estilo asentado

I Was Never There y Hurt You (cuarto y quinto tema del álbum respectivamente), cuentan con la colaboración del francés Gesaffelstein, uno de los hombres en la sombra más codiciados de la música electrónica. El resultado son las dos canciones más sorprendentes de este My Dear Melancholy, la elegancia característica del sonido de The Weeknd brillando a su máxima potencia.