Three Billboards Outside Ebbing, Missouri (2017) de Martin Mcdonagh (Escondidos en Brujas), es una interesante y sugerente historia, con todos los elementos para un buen cóctel, humor negro, rencor, odio, amor, sentimientos... humanidad. Ofrece todos los tonos de los colores humanos con un elenco de actores fabulosos, Frances McDormand (Fargo) y Woody Harrelson (No es país para viejos) que nos ubican en el imaginario de los Coen. Mucho de la herencia de los hermanos más famosos del Cine contemporáneo tiene el film, pero eso sí, de otra manera.

El director irlandés Martin Mcdonagh nos ubica en un páramo mucho más sociológico donde exprime sin pudor el racismo, la homofobia, la violencia...

también el objetivismo esa pseudofilosofía del capital para destruir al prójimo, de una sociedad en caída libre. De igual modo el sentido del humor, negro, negrísimo, pero sin los tics descompresores de los Coen. En Tres anuncios a las afueras las palabras tienen un peso demoledor en la figura de una madre coraje, fuerte y firme en las espaladas de una magnífica Frances Mcdormand (su pareja es Joel Coen) con única “debilidad” –podríamos definirla de esta manera, pero entre comillas- humana, pero dirigida al objeto de sus males: el odio, la ira, el rencor, en esta película los pecados capitales se entienden y se comparten, se humanizan como un proceso normal de autodefensa ante la injusticia y lo inmerecido.

El film te enseña las variadas capas de la ira, incluso si es justa. Esas personas no están locas, aunque así las definan durante el transcurso de la historia... De hecho lo más brillante del film son los vaivenes de carácter, los choques y golpes en este compendio humano, y sobre todo entre dos personajes antagónicos que serán aliados en un viaje redentor... o no. Ese es la conquista del film y de la buena labor de Mcdonagh, la evolución desde su registro de los personajes. Las dos caras del odio se encuentran en almas bellas.