Ya dijo Jaume Balagueró que el jefe de todo esto era Paco Plaza, su narrativa y formas de abordar la cámara como una función de real cinema, han dotado al terror patrio de una atmosfera de verosimilitud directa –The Blair witch project (1999), tuvo una transcendencia importante en eta deriva. Verónica, es un film que se inspira en los acontecimientos paranormales de El expediente Vallecas. El caso que aconteció a principio de la década de los noventa, y que calificó la muerte de la joven Estefanía Gutiérrez Lázaro, como el único caso oficial paranormal identificado por la policia en España .

Hoy en día, el caso aún sigue abierto, y no se han podido explicar los hechos que allí acontecieron. La joven después de llevar a cabo una Ouija en su colegio, comienza a sufrir crisis de salud durante un año que le llevarían a la muerte. En medio de esta desolación, durante ese tiempo, en la casa familiar acontecieron fenómenos paranormales: voces, objetos que se mueven, puertas que se abren y se cierran, fotografías que se prenden de forma arbitraria, sombras acechantes... Todo recogido por informes imparciales de la policía. Verónica (2016), es la crónica de estos hechos, un film rodado con mucho oficio, utilizando muy bien los movimientos de los personajes a través de los pasillos de una casa de protección oficial.

Las imágenes que Paco Plaza logra, crean un juego sugerente de visiones entrecortadas, a través de estas pequeñas estancias del inmueble, dotando al film de una relevancia cinematográfica singular, un tiempo óptimo, y sobre todo de una veracidad de andar por casa.