El Hajj es una Peregrinación religiosa que es obligatoria para los musulmanes adultos sanos que pueden permitirse el viaje a la Meca. Los musulmanes han estado realizando el Hajj durante casi 1.500 años. Los ritos del Hajj conmemoran importantes acontecimientos de la historia islámica y bíblica, dando a los peregrinos una oportunidad única de centrarse en la oración y el arrepentimiento.
Mientras que los rituales del Hayy son los mismos para todos los peregrinos, el significado de la peregrinación puede ser único para cada persona…
En primer lugar, el Hajj es acerca de la fe.
La fe en términos de oración y creencias, pero también la noción de que debemos sentirnos cómodos con la idea del destino. El Hajj nos enseña que debemos poner el trabajo y el esfuerzo, pero también aceptar que mucho está fuera de nuestro control. Como dijo el Profeta Muhammad una vez, "Confía en Dios, pero ata a tu camello".
Qué significa el Hajj
El Hayy es también resiliencia. Como personas, a veces nos olvidamos de lo fuertes que realmente somos. El Hayy puede exigir incluso a los más aptos de los peregrinos, y, sin embargo, logramos completarlo. El Hayy nos recuerda que siempre podemos levantarnos y hacer más.
El Hayy habla sobre la humanidad. El Hajj ilumina el poder del espíritu humano. A pesar de las barreras del lenguaje y la cultura, el corazón puede elevarse por los innumerables actos de bondad que uno presencia durante el Hayy.
Y, a pesar del gran volumen de peregrinos que asisten al hajj, la belleza del hajj se revela a menudo a través de las interacciones individuales entre las personas.
El Hayy trata sobre la comunidad. Aunque a menudo pensamos en la oración y la fe como algo personal e interior, nos anima a mirar hacia afuera a la comunidad que nos rodea.
¿Quién está en mi comunidad? ¿Cómo se ve mi comunidad? ¿Cómo puedo mejorar mi comunidad? ¿Cómo puedo pensar en la comunidad en el sentido más inclusivo posible?
Lo que naturalmente nos lleva a la abnegación. Tanto de Hajj es sobre el desafío de poner a otros antes de nosotros mismos. Estar orgulloso del grupo con el que haces el camino y la peregrinación.
Pero, la tentación está en preguntarse si había sido tan generoso durante el resto de mi Hayy. El Hayy le muestra a uno cuánto puede llegar a ser de desinteresado, pero lo difícil que es serlo.
Por último, el Hayy es paciencia. Antes de salir de casa para el Hajj, se recomienda hacer acopio de paciencia. Montones y montones de paciencia… Durante el hajj, la paciencia se puede probar en los momentos más sagrados y mundanos. Incluso mientras se ayuda a un compañero peregrino, uno puede sentirse impaciente, pero la actitud correcta es "¿Qué más puedo hacer para ayudar?"
Hajj es una experiencia increíble, pero al final, el peregrino volverá a casa, al peregrinaje del día a día. Como los peregrinos que vuelven de Santiago de Compostela, o de la India, o del Tíbet, o de Jerusalén… O de tantos lugares sagrados en el mundo y que representan la experiencia del día a día resumido en un camino.