Es importante conocer el nivel de rendimiento de los alumnos al estudiar de los alumnos, así como si tienen demasiados contenidos para aprender, créditos y la ansiedad o el estrés que se acumula ante la llegada de los exámenes. El método más empleado para conocer y poder evaluar este estrés y la ansiedad ocasionada de los alumnos, es el indicador o método burnout. Lo cierto es que las características nombradas son muy frecuentes entre los estudiantes españoles, y tanto ellos mismos como sus profesores deben saber cómo aprender a evitarlas.
Según una investigación de la Universitat Jaume I de Castellón, aquellos alumnos con mayor predisposición a padecer de ansiedad y estrés ante la llegada de los exámenes, son los estudiantes de carreras tales como Ciencias Jurídicas y Económicas. Sin embargo, los que mayor dominan estas situaciones son los alumnos de carreras en torno a las Ciencias Humanas y Sociales. 
Algunas de las universidades más importantes de hoy en día, enseñan a sus alumnos a cómo meditar y aprender a controlar esos niveles tan altos de ansiedad y estrés acumulado con resultados bastante óptimos. La técnica más empleada para ello, es la conocida como Mindfulnessen, que además también sirve para mejorar el rendimiento académico de los estudiantes como consecuencia. 
Una de las cuestiones más importantes a tratar es la atención, y más en la actualidad, puesto que debido a tantas distracciones tecnológicas, como el ordenador y el móvil por ejemplo, estamos más predispuestos a dejar y apartar con facilidad el estudio para dedicar nuestro tiempo a éstas últimas. Resulta pues imprescindible trabajar la memoria y la atención para mejorar en nuestro estudio, cuestiones que mejorar claramente con la práctica diaria o eventual de la meditación. Uno de los métodos más aconsejables para trabajar la atención es con la respiración mientras se trata de dejar la mente en blanco y en busca de nuevos pensamientos. Al menos, si se decide por trabajar a través del método Mindfulnessen, se recomienda al menos practicar como mínimo durante cinco minutos al día, especialmente antes de comenzar con el estudio, aunque también es aconsejable practicar la técnica aunque no se tengan exámenes cercanos.