Tal día como hoy, el 20 de octubre de 1977,el avión que transportaba a la banda de rock sureño Lynyrd Skynyrd cayó cuandosobrevolaba el condado de Amite en Mississippi. El avión, que se había quedadosin combustible, trató de efectuar un aterrizaje de emergencia pero se estrellóen un bosque cerca de Gillsburg. Laconsecuencia fue la muerte del vocalista Ronnie Van Zant, el guitarrista SteveGaines y su hermana, la corista Cassie Gaines.
Ese momento dramático terminó con una brevísimacarrera de apenas 4 años desde su disco debut en 1973 en la que consiguieroncrear temas que ya son historia del rock como el archiconocido “Sweet HomeAlabama” que se creó en contestación a dos canciones de Neil Young "Southern man" y "Alabama" que denunciaban el pasado racista del sur, o esa obra magna que es la balada “Free Bird”.
El accidente de avión de la banda se sumó ala fatídica lista negra de figuras de la Música fallecidas en circunstanciassimilares. Nombres como Ricky Nelson, que aparece en Río Bravo cantando “MyRifle, My Pony and me” con Dean Martin, o Patsy Cline, autora del inolvidable “Crazy”también perdieron su vida en accidentes aéreos. Y, como ellos, el genio delblues Stevie Ray Vaughan, el no menos genial Otis Redding o Buddy Holly,Ritchie Valens y Big Bopper que murieron en el mismo accidente, un 3 de febrerode 1959 conocido desde entonces como “el día en que murió la música”. Este último motivó que Elvis se negase a volarhasta los conciertos de Miami de 1970.
Tras el accidente, Lynyrd Skynyrd sedisolvieron.
Los guitarristas Allen Collins y Gary Rossington se reunieron encasa Ronnie Van Zant y decidieron que jamás volverían a reunir al grupo. Sinembargo Rossington faltó a su palabra y 10 años después, en 1987, junto a JohnnyVan Zant, vocalista y hermano menor de Ronnie, lanzaron de nuevo a la bandatras llegar a un acuerdo judicial con las viudas de los miembros fallecidos enel accidente.
Sin embargo, los años siguientes no hansupuesto una aportación relevante a la historia de la música, editando algunos discos que hanpasado desapercibidos y centrándose más en las actuaciones en directo (se lespudo ver hace poco en España durante el Azkena Rock Festival) o promoviendo actividadescontrovertidas como la organización de los cruceros temáticos rockeros “SimpleMan Cruise”.
Es frecuente que haya bandas de versionestocando en los bares de rock and roll de Nashville. El visitante se encuentracon una lista enorme de canciones que puede pedir simplemente tomándose unacerveza y dejando una propina en la caja del grupo. Solo hay una de ellas quetiene precio. Y no un precio cualquiera. Si alguien quiere escucharla tiene quepagar 100 dólares. Esa canción es el mítico e inolvidable “Free bird”.