El transporte público en España intenta poco a poco mejorar su servicio para satisfacer a un mayor número de personas y para disminuir la circulación de vehículos propios que contaminan en mayor medida la atmósfera con gases que generan agujeros en la capa de ozono. En Valencia, más concretamente, los ciudadanos disponen del servicio de metro (subterráneo), tranvía (de la misma compañía pero que circula por la superficie) y autobuses de la EMT.
Desde hace varios años se celebra el "día europeo sin coches" para conseguir reducir el uso de los turismos al mínimo posible.
Veces pasadas se había facilitado a los niños un bono que servía como un viaje gratis en el autobús y cosas similares, pero este año se ha decidido hacer de modo telemático (capturando una foto de la marquesina de la parada de autobús en el teléfono móvil) y de uso libre y totalmente gratuito durante todo el día (no había número límite de viajes por pasajero). Hoy se ha llevado a cabo el servicio gratuito de los autobuses de la EMT pero ayer se hizo lo mismo con el metro y el tranvía. Estas empresas también se encargan del mantenimiento y servicio del famoso "Valenbisi", en el que también se amplió durante un día el tiempo para usar las bicis sin tener que cambiarlas o depositarlas en una nueva base; normalmente son 30' y en este día se podía utilizar hasta 2 horas seguidas.
Tras toda la energía que malgastamos a lo largo del día y la gran contaminación que producen los aparatos electrónicos que se han convertido en imprescindibles en nuestras vidas, está bien que intentemos utilizar el transporte público. Para rebajar el coste y premiar a aquellas personas que utilizan este medio de transporte normalmente, salen continuamente ofertas y precios especiales para diferentes conjuntos de personas: el bono oro para los jubilados, precio de estudiante para universitarios, bonos mensuales o anuales para aquellos que cogen el bus varias veces al día…
Pensemos un poco en la naturaleza y hagamos lo que esté en nuestras manos para evitar contaminar el entorno en el que vivimos. Si usas tus piernas para pedalear en vez de para apretar el embrague o el acelerador, tu cuerpo te lo agradecerá y el aire que respiras será más limpio.