Los cortometrajes son producciones cinematográficas que tienen una duración máxima de 30 minutos, y que, en cuanto a géneros, coinciden con los de los largometrajes, aunque debido a las limitaciones económicas que suelen tener este tipo de producciones, se suelen tratar temas poco comerciales o "explotados".
Este tipo de producciones suelen ser las elegidas por aficionados que quieren empezar a realizar sus propios trabajos, ya que permiten una mayor libertad creativa y un bajo coste económico, de ahí que sea una de las bases de muchos grandes directores consagrados, que comenzaron su andadura cinematográfica a partir de los cortometrajes.
En sus inicios, los cortometrajes necesitaban de un gran equipo de producción y materiales que permitieran un resultado óptimo, y que la producción sobresaliera de otros, algo que hoy es más sencillo debido al bajo coste de las nuevas tecnologías y su fácil acceso, la producción de aficionados, los efectos y las técnicas que hoy están al alcance de cualquiera, y que son suficientes para realizar un buen corto.
Los cortometrajes suelen englobar diferentes estilos, géneros y temáticas, que en una producción cinematográfica, quizás, no se podría ver, debido a que no existe ningún canon que seguir, y los directores tienen vía libre en su creación, interpretación, montaje, etc.
A pesar de tener muchas ventajas, este negocio tiene complicadas sus salidas, ya que el mercado no está bien definido y el sector más comercial de este ámbito no está, de momento, muy trabajado. El principal objetivo de estas producciones es cultural, de acercamiento hacia un tema desconocido, la crítica hacia temas sociales…
Sin embargo, cada año son más los festivales y concursos que se celebran tanto a nivel nacional como internacional, cuyo nivel ha llegado hasta los premios Goya, aunque en muy menor medida respecto a los largometrajes.
Gracias a internet, la difusión de los cortometrajes está aumentando en los últimos años, y se ha convertido en uno de los formatos más aceptados en los medios digitales, ya que el público busca contenidos de poca duración y de temas que realmente les afectan, por lo que se adaptan perfectamente a las necesidades de los internautas.