El pasado domingo se desató un enfrentamiento que dejó 10 muertos y varias decenas de heridos en al menos 5 ciudades de Nicaragua, cuando se comenzó a ejecutar la “operación limpieza” encabezada por representantes del gobierno.
Esta operación se trata de atacar a personas civiles para que desbloqueen las carreteras, situación que deja muy mal parado al actual gobierno, puesto que se están violentando los derechos humanos ciudadanos, tal como lo denunció la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) en la tarde ayer.
Según el reporte emitido ayer por cada municipio se pudo evidenciar que tanto los civiles como los integrantes de la Policía Nacional se vieron afectados por estos enfrentamientos. En Masaya, específicamente en el barrio Camilo Ortega, el saldo negativo fue de seis víctimas, se dice que cuatro de ellos son miembro de la policía antimotín, aunque hasta los momentos no han dado declaraciones para confirmar los decesos.
Mientras en el Municipio Catarina hubo una bala perdida que llegó a impactar a una niña de 10 años en la zona del abdomen provocándole la muerte luego de ingresar a un centro de salud y no recibir atención médica. Al igual que otras personas que también corrieron con la misma suerte. También en el municipio Diría, las fuerzas armadas desalojaron de sus casas a dos opositores a Ortega, Almer Morales y Allan Morales, padre e hijo y fueron ejecutados, violentando sus derechos y quitándole la vida de manera arbitraria, sin importar que la ciudadanía los estuviese observando.
Continúa el asedio por parte del gobierno
El régimen sandinista esta atacando directamente a la ciudadanía, está claro que no cesarán las acciones mientras sigan los manifestantes en la calle.
Los habitantes de Masaya declararon: “Nos están atacando la policía nacional y parapolicías encapuchados y armados con AK y ametralladoras a nuestro barrio indígena de Monimbó”.
Se están lanzando llamados de ayuda a diferentes organizaciones, entre ellas la Conferencia episcopal, la ONU y la Comisión Internacional de los Derechos Humanos.
Mientras tanto continúa el asedio por parte del gobierno, tal cual como lo declaró el secretario Paulo Abrao, quien en su cuenta de twitter escribió “la represión violenta a las poblaciones de Masaya. El estado parece ignorar el diálogo con la oposición”
Ortega está dispuesto a limpiar a punta de balas
Los mecanismos utilizados por Ortega son en definitiva los de un régimen dictatorial.
Desde el 18 de abril, el primer mandatario ha dado señales de que está dispuesto a limpiar a punta de balas, como muestra están los 350 muertos que ha dejado las pasadas manifestaciones.
Lo mismo demostró el viernes y el sábado cuando ocurrieron los hechos en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN). Los estudiantes de esa institución corrieron despavoridos para refugiarse en la iglesia La Divina Misericordia, al suroeste de Managua.